LONDRES (AP) — Los legisladores del Reino Unido pidieron el miércoles un alto el fuego en la guerra entre Israel y Hamas, pero solo después de que docenas se retiraran de la Cámara de los Comunes en protesta por cómo se manejó la votación.
Los legisladores habían estado debatiendo tres resoluciones diferentes relacionadas con la guerra. Todas eran en su mayoría simbólicas y no vinculantes para el gobierno.
Pero el Parlamento descendió en caos cuando legisladores del partido gobernante Conservador y un partido de oposición acusaron al presidente de la Cámara, Lindsay Hoyle, de trastornar el procedimiento parlamentario.
El caos estalló durante el debate sobre una moción del partido de oposición Partido Nacional Escocés (SNP, por sus siglas en inglés), que instaba a un alto el fuego inmediato, la liberación de todos los rehenes israelíes retenidos por Hamas y “el fin del castigo colectivo del pueblo palestino”.
El principal partido de oposición, el Partido Laborista, que está dividido sobre lo fuerte que debe criticar a Israel, presentó una versión modificada de la moción que pedía un “alto el fuego humanitario inmediato”, sin mencionar el castigo colectivo.
Los Conservadores presentaron su propia enmienda, que respaldaba una “pausa humanitaria inmediata”, seguida de “medidas hacia un alto el fuego permanente y sostenible”. El gobierno dice que un alto el fuego solo puede ocurrir si Hamas libera a todos los rehenes israelíes y renuncia al control de Gaza.
Cuando Hoyle permitió votaciones sobre las tres resoluciones, los legisladores conservadores estaban furiosos, diciendo que iba en contra de las convenciones de la Cámara de los Comunes. Algunos acusaron a Hoyle, quien fue elegido como legislador laborista antes de asumir el cargo neutral de presidente, de favorecer a la oposición.
El caos político es un signo de cómo el conflicto ha dividido a los políticos y al público británicos, haciendo que las tensiones aumenten.
“Su decisión ha elevado las temperaturas en esta Cámara en un tema donde ya hay sentimientos muy fuertes”, dijo Penny Mordaunt, líder conservadora de la Cámara de los Comunes.
Mientras tanto, el SNP acusó al Partido Laborista de secuestrar su moción, y dijo que Hoyle les había permitido hacerlo.
Muchos miembros conservadores y del SNP se retiraron, y en su ausencia la versión laborista de la llamada al alto el fuego fue aprobada por votación oral, sin una votación formal completa.
Después, Hoyle se disculpó por el caos.
“Lamento cómo ha terminado”, dijo Hoyle. “Quería asegurarme de que todos pudieran expresar sus opiniones y que todos los sectores de la Cámara pudieran votar”.