La industria de las criptomonedas está esperando un tan ansiado auge bajo la segunda presidencia de Donald Trump.
La reelección de Trump cambió las cosas para el sector, que espera finalmente obtener una regulación integral en lugar de una serie de demandas de la SEC, según el CEO de Paxos, Chad Cascarilla.
“Realmente puede dar inicio a una Edad de Oro de las criptomonedas donde se establecen las reglas correctas”, dijo Cascarilla en el Fortune Global Forum el lunes durante un panel sobre el futuro de las finanzas descentralizadas.
Se espera que una segunda administración de Trump sea muy favorable para la industria de las criptomonedas, pero un nuevo régimen regulatorio para las criptomonedas se enfrentaría a decisiones importantes y tendría consecuencias críticas para la economía de Estados Unidos y global. La pregunta central que enfrentan los reguladores es en qué medida las monedas digitales y criptomonedas se convierten en una parte formal del sistema financiero de EE. UU. Como tecnología, las criptomonedas digitales pueden facilitar transacciones entre partes sin intermediarios, una promesa tentadora, dicen los defensores, que empoderaría a los consumidores ordinarios y posiblemente debilitaría a los grandes bancos. Sin embargo, los reguladores también tendrían que considerar las preocupaciones de que las criptomonedas puedan usarse para delitos financieros como el lavado de dinero.
Charles Adkins, presidente de la empresa blockchain Hedera, se mostró molesto ante la caracterización de que las empresas de criptomonedas son infractores de las reglas. “Lo que la mayoría de las personas en esta industria están deseando es simplemente algún tipo de límites y regulaciones”, dijo Adkins. “Existe la percepción de que la industria de las criptomonedas no quiere seguir las reglas, y eso está muy lejos de la verdad.”
Cuando el presidente electo Trump ganó la elección presidencial la semana pasada, las criptomonedas se dispararon en las noticias. El precio de Bitcoin subió un 27% desde la elección el 5 de noviembre. Su precio ahora se sitúa por encima de los $86,000 después de alcanzar brevemente máximos históricos. Otras criptomonedas como Dogecoin y Ether también aumentaron sus valores después de los resultados de las elecciones. Mientras tanto, el precio de las acciones de la bolsa de criptomonedas digitales Coinbase, donde se negocian muchas criptomonedas, subió un 67% desde las elecciones.
En la campaña electoral, Trump dijo repetidamente que tenía la intención de hacer de Estados Unidos la “capital mundial de las criptomonedas”. Y aunque los expertos de la industria ciertamente dan la bienvenida a un evangélico de las criptomonedas en la Casa Blanca, también esperan que Trump implemente con éxito regulaciones que determinen cómo deben comportarse las empresas. Sin leyes claras que seguir, las empresas habían estado operando con cautela, según Adkins.
La falta de claridad había obstaculizado el negocio de Paxos en los EE. UU., que creció a un ritmo más lento que sus mercados internacionales, según Cascarilla. “Hay tanta demanda acumulada”, dijo. Con Trump completando los puestos clave en su administración, los expertos en criptomonedas están atentos a si nombrará a algún designado amigable para las agencias financieras. Están considerando al ex funcionario de la SEC y actual ejecutivo de Robinhood, Daniel Gallagher, y a dos comisionados actuales de la SEC, Hester Peirce y Mark Uyeda, según el Washington Post.
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