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(Reuters) – El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha criticado duramente la respuesta de California a los devastadores incendios en Los Ángeles, dijo el sábado que muy probablemente visitará la zona la próxima semana después de su inauguración.
Los incendios han cobrado la vida de al menos 27 personas hasta el viernes y han destruido más de 10,000 estructuras en las zonas residenciales de Pacific Palisades y Altadena.
“Voy a ir, probablemente, al final de la semana”, dijo Trump, un republicano que será inaugurado el lunes, en una entrevista con NBC.
“Iba a ir … ayer pero pensé que sería mejor si iba como presidente. Es un poco más apropiado, supongo”.
El gobernador de California, Gavin Newsom, invitó la semana pasada a Trump a visitar la zona, diciendo que la gente no debería “politizar la tragedia humana ni difundir desinformación desde las gradas”.
A medida que el incendio se propagaba, Trump exigió que Newsom, un demócrata, renunciara, afirmando que sus políticas causaron escasez de agua que dificultó los esfuerzos de lucha contra incendios. Newsom dijo que las acusaciones eran infundadas.
Trump también acusó a la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, de incompetencia y dijo que el presidente Joe Biden no le dejó dinero en el presupuesto de la Agencia Federal de Manejo de Emergencias.
Los incendios forestales, que comenzaron el 7 de enero, se propagaron rápidamente bajo condiciones secas y vientos extremadamente fuertes de Santa Ana. Funcionarios de Los Ángeles pidieron a la mayoría de los evacuados el jueves que se mantuvieran alejados de sus hogares al menos otra semana.
Las estimaciones de los daños van desde $20 mil millones a $45 mil millones. Los alquileres han aumentado considerablemente y la incertidumbre sobre los acuerdos de seguros ha dejado a algunos de los desplazados en el limbo.
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