Este jueves, Suecia se unió formalmente a la OTAN como el 32º miembro de la alianza militar transatlántica, poniendo fin a décadas de neutralidad posterior a la Segunda Guerra Mundial y siglos de no alineación con potencias principales a medida que han aumentado las preocupaciones de seguridad en Europa tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia en 2022.
El presidente Joe Biden felicitó a Suecia por su admisión y dijo que era un signo de que la intervención de Rusia en Ucrania había unido, en lugar de dividir, a la alianza.
“Cuando Putin lanzó su guerra brutal de agresión contra el pueblo de Ucrania, pensó que podría debilitar a Europa y dividir a la OTAN”, dijo Biden en un comunicado, que se espera que repita en su discurso del Estado de la Unión ante el Congreso más tarde este jueves.
“En cambio, en mayo de 2022, Suecia y Finlandia, dos de nuestros estrechos socios con dos fuerzas militares altamente capaces, tomaron la histórica decisión de solicitar la membresía plena en la OTAN”, dijo Biden. “Con la incorporación de Suecia hoy, la OTAN está más unida, decidida y dinámica que nunca, ahora con 32 naciones poderosas”.
El primer ministro sueco Ulf Kristersson y el Secretario de Estado Antony Blinken presidieron una ceremonia en la que el “instrumento de adhesión” de Suecia a la alianza fue oficialmente depositado en el Departamento de Estado.
“Este es un momento histórico para Suecia. Es histórico para la alianza. Es histórico para la relación transatlántica”, dijo Blinken. “Nuestra alianza de la OTAN es ahora más fuerte, más grande que nunca”.
“Hoy es verdaderamente un día histórico”, dijo Kristersson. “Estamos humildes, pero también estamos orgullosos. Estaremos a la altura de las altas expectativas de todos los aliados de la OTAN. Unidos resistimos. La unidad y la solidaridad serán la luz guía de Suecia”.
Más tarde este jueves, Kristersson visitaría la Casa Blanca y luego sería un invitado de honor en el discurso del Estado de la Unión de Biden.
El Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, también lo describió como “un día histórico”.
“Suecia ocupará ahora su lugar legítimo en la mesa de la OTAN, con voz igual en la configuración de las políticas y decisiones de la OTAN”, dijo en un comunicado.
La bandera sueca ondeará fuera de la sede de la organización militar en Bruselas el lunes. Stoltenberg subrayó que el país nórdico “ahora goza de la protección concedida por el Artículo 5, la garantía última de la libertad y seguridad de los aliados”.
El Artículo 5 del tratado de la OTAN obliga a todos los miembros a acudir en ayuda de un aliado cuyo territorio o seguridad estén amenazados. Solo se ha activado una vez, por los Estados Unidos tras los ataques del 11 de septiembre de 2001, y es la garantía de seguridad colectiva que Suecia ha buscado desde que Rusia invadió Ucrania.
“La adhesión de Suecia hace a la OTAN más fuerte, a Suecia más segura y a toda la alianza más segura”, dijo Stoltenberg. Añadió que la decisión “demuestra que la puerta de la OTAN sigue abierta y que cada nación tiene derecho a elegir su propio camino”.
Suecia, junto con Finlandia, que se unió a la OTAN el año pasado, abandonaron la neutralidad militar de larga data que fue característica de la política exterior de los Estados nórdicos durante la Guerra Fría después de que Rusia invadiera Ucrania a principios de 2022.
Se esperaba que Biden, en su discurso ante el Congreso, utilizara la decisión de Suecia de unirse para intensificar los llamamientos a los republicanos renuentes a aprobar la asistencia militar estancada a Ucrania a medida que la guerra entra en su tercer año.
Biden y sus homólogos de la OTAN han prometido que Ucrania se unirá algún día también.
La adhesión de Suecia se había retrasado debido a objeciones de los miembros de la OTAN, Turquía y Hungría. Turquía expresó su preocupación de que Suecia albergara y no tomara suficientes medidas contra grupos kurdos que considera terroristas, y el presidente populista de Hungría, Viktor Orban, ha mostrado simpatía pro-rusa y no ha compartido la determinación de la alianza de apoyar a Ucrania.
Después de meses de retraso, Turquía ratificó la admisión de Suecia a principios de este año, y Hungría lo hizo esta semana.
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Cook informó desde Bruselas. El escritor de AP Jan M. Olsen contribuyó desde Copenhague, Dinamarca.
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