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Por Alexander Winning
JOHANNESBURGO (Reuters) – Los sudafricanos votan el miércoles en las elecciones más competitivas desde el fin del apartheid, con encuestas de opinión que sugieren que el Congreso Nacional Africano (CNA) perderá su mayoría parlamentaria después de 30 años en el gobierno.
Dirigido entonces por Nelson Mandela, el ANC llegó al poder en las primeras elecciones multirraciales de Sudáfrica en 1994 y ha ganado una mayoría en las elecciones nacionales celebradas cada cinco años desde entonces, aunque su parte del voto ha disminuido gradualmente.
Si no alcanza el 50% esta vez, el ANC tendrá que hacer un trato con uno o más partidos más pequeños para gobernar, aguas desconocidas y potencialmente agitadas para una joven democracia que hasta ahora ha sido totalmente dominada por un solo partido.
Sin embargo, el ANC todavía está en camino de ganar la mayor parte de los votos, lo que significa que su líder, el presidente Cyril Ramaphosa, probablemente permanecerá en el cargo, a menos que enfrente un desafío interno si el desempeño del partido es peor de lo esperado.
La insatisfacción de los votantes por las altas tasas de desempleo y criminalidad, los frecuentes apagones y la corrupción en las filas del partido están detrás de la gradual caída en desgracia del ANC.
Más de 27 millones de sudafricanos están registrados para votar en más de 23,000 centros de votación que estarán abiertos desde las 0500 GMT hasta las 1900 GMT.
Los votantes elegirán asambleas provinciales en cada una de las nueve provincias del país, y un nuevo parlamento nacional que luego elegirá al próximo presidente.
PARTIDOS DE OPOSICIÓN
Entre los partidos de oposición que compiten por el poder está la proempresarial Alianza Democrática, que obtuvo la segunda mayor parte de los votos en 2019 y ha formado una alianza con varios partidos más pequeños para tratar de ampliar su atractivo.
También esperando ganar influencia, los Combatientes por la Libertad Económica, fundados por un exlíder influyente de la Liga Juvenil del ANC, quieren nacionalizar minas y bancos y expropiar tierras de los agricultores blancos para abordar las disparidades raciales y económicas.
El ex presidente Jacob Zuma está respaldando un nuevo partido llamado uMkhonto we Sizwe (MK), nombrado en honor a la antigua ala armada del ANC. Zuma, quien se vio obligado a renunciar como presidente en 2018 tras una serie de escándalos, tiene una influencia duradera, especialmente en su provincia natal de KwaZulu-Natal.
Se espera que la comisión electoral comience a publicar resultados parciales dentro de unas horas después del cierre de las urnas. La comisión tiene siete días para anunciar los resultados finales, pero en la última elección -también celebrada en un miércoles- lo hizo en un sábado.
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