Shohei Ohtani y su intérprete se ven envueltos en un escándalo de juegos de azar de $4.5 millones.

El debut del superastro de béisbol Shohei Ohtani para los Dodgers de Los Angeles el miércoles fue arruinado por uno de los escándalos de juego más destacados de la historia reciente: la revelación de que supuestamente pagó $4.5 millones a un corredor de apuestas ilegal de California para cubrir las deudas de apuestas deportivas de su traductor.

Mientras investigaban una red de juego ilegal en el condado de Orange, los fiscales federales descubrieron el nombre de Ohtani vinculado a dos transferencias electrónicas de $500,000 enviadas a un corredor de apuestas llamado Mathew Bowyer, que ESPN informó que fue confirmado por estados de cuenta bancarios. ESPN citó varias fuentes que confirmaron que los pagos se realizaron para cubrir las pérdidas de apuestas de Ippei Mizuhara, el traductor de Ohtani.

Ohtani, quien es japonés y no habla inglés con fluidez, ha sido inseparable de Mizuhara desde que debutó en la MLB para los Angeles Angels en 2018. Mizuhara traduce para Ohtani en conferencias de prensa y reuniones de equipo, pero los dos también han sido conocidos por pasar mucho tiempo juntos fuera del campo y tener una fuerte relación personal, según informó inicialmente el LA Times.

Los Dodgers despidieron a Mizuhara el miércoles por la tarde después de que surgieran informes de la deuda de juego. Mizuhara dijo en una entrevista con ESPN el martes que comenzó apostando a través de DraftKings antes de hacer apuestas con Bowyer, a quien creía que operaba ilegalmente. Pronto, las deudas de Mizuhara crecieron a más de $4.5 millones.

En la entrevista inicial del martes, Mizuhara dijo que había pedido a Ohtani, quien firmó un contrato de 10 años y $700 millones con los Dodgers el año pasado, que pagara sus deudas a Bowyer. Ayer, sin embargo, se retractó de su explicación inicial y ofreció un relato diferente, diciendo que Ohtani nunca estuvo al tanto de su juego y no había pagado sus deudas, sin ofrecer ninguna explicación para los dos pagos confirmados de $500,000. Ohtani aún no ha comentado si sabía sobre el juego de Mizuhara.

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“Shohei ha sido víctima de un robo masivo, y estamos entregando el asunto a las autoridades”, dijeron los abogados de Ohtani de la firma Berk Brettler LLP en un comunicado.

La política de la MLB prohíbe estrictamente a los atletas apostar en juegos de béisbol, aunque pueden apostar en otros deportes. Mizuhara dijo que nunca hizo apuestas en juegos de béisbol. Aunque el juego de apuestas deportivas legalizadas se ha extendido por todo el país, California es uno de un número cada vez menor de estados donde las apuestas deportivas siguen siendo ilegales, razón por la cual se investigaron las apuestas que Mizuhara realizó a través de Bowyer en primer lugar.

“Obviamente, todo es culpa mía, todo lo que he hecho”, dijo Mizuhara a ESPN. “Estoy listo para enfrentar todas las consecuencias.”

Ohtani, un superastro de la MLB que ganó su segundo premio al Jugador Más Valioso el año pasado, hizo su debut para los Dodgers esta semana en un juego contra los Padres de San Diego en Seúl, Corea. Declinó hacer comentarios a los reporteros después del juego. Los Dodgers regresarán a los Estados Unidos para el primer juego en casa de la temporada contra los Angels, el antiguo equipo de Ohtani, el domingo.

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