La situación se volvió crítica cuando las tropas rusas entraron en la ciudad y las unidades ucranianas comenzaron a retirarse sin esperar la orden de retirada. “Si no se organiza una retirada, termina siendo caótica”, explicó el ametrallador. Los defensores ucranianos eran como Titanes intentando detener a los rusos, dijo. Pero algunos grupos, agregó, se habían desorientado completamente debido a un apagón de comunicación. Sus radios estaban caídas y, cuando fueron atacados intensamente, tuvieron que tomar decisiones rápidas por su cuenta y a menudo era retirarse. Las líneas de defensa ucranianas fueron devastadas por las bombas de aviación de Rusia y por sus sistemas de armas termobáricas como su lanzallamas pesado Solntsepek, además de drones y lanzacohetes múltiples. Frente a tal embate, retirarse de ciertas posiciones se volvió inevitable, argumentó Roman. “O mueres o te retiras”. Pero escapar de una ciudad que había sido casi rodeada era extremadamente peligroso. Durante el día se convertía en una misión cercana al suicidio. Las tropas de Ucrania intentaron escapar principalmente por la noche, teniendo que cruzar campos de minas a través de senderos designados para evitar la carretera porque estaba estrechamente vigilada por los rusos. Hasta hace poco, los vehículos de evacuación habían podido conducir cubiertos por la oscuridad con las luces apagadas, explicó Roman. Pero una vez que las tropas rusas habían llegado al centro de la ciudad, la única forma de escapar era a pie. Los que lograron salir están exhaustos y deprimidos. También están enojados con sus comandantes por no haber ordenado la retirada antes, porque argumentan que era obvio desde hacía algún tiempo que las fuerzas ucranianas no podrían mantener la ciudad por mucho tiempo. “No sé por qué [no dieron la orden]”, dijo el ametrallador. “Tal vez sea miedo a la cúpula militar o tal vez fue una orden desde arriba [mantener posiciones] con nuestra sangre hasta el final”. Los funcionarios militares de la 72ª brigada y el comando operativo de Ucrania en la zona se negaron a comentar la solicitud de la BBC. En sus informes diarios más recientes, el Estado Mayor del ejército guardó silencio sobre Vuhledar. La sesión informativa del miércoles por la mañana simplemente dijo que “el enemigo lanzó ataques infructuosos contra nuestras posiciones en la dirección de Bohoyavlenka”, sin mencionar en absoluto la situación en Vuhledar.
