Viene en medio de relaciones empeorando entre el Reino Unido y Rusia desde la invasión a gran escala de Ucrania por parte de esta última en 2022. La semana pasada, se supo que el Reino Unido levantó restricciones para que Ucrania use misiles Storm Shadow suministrados por los británicos en objetivos dentro de Rusia por primera vez. El presidente Vladimir Putin citó esta acción, junto con el lanzamiento de misiles de mayor alcance suministrados por Estados Unidos a territorio ruso, como la razón detrás de la decisión de Rusia de lanzar un nuevo misil hipersónico en la ciudad ucraniana de Dnipro el jueves. Las expulsiones de diplomáticos se han vuelto cada vez más comunes desde que comenzó la guerra. A principios de este año, el diplomático británico Capt Adrian Coghill tuvo una semana para abandonar Rusia, días después de que el agregado de defensa ruso fuera expulsado de Londres por presunto espionaje como un “oficial de inteligencia militar no declarado”.