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Por Josh Smith y Ju-min Park
SEÚL (Reuters) – El presidente ruso Vladimir Putin y el líder norcoreano Kim Jong Un mantuvieron una cumbre el miércoles después de una gran ceremonia de bienvenida en la Plaza Kim Il Sung en Pyongyang, informaron los medios rusos, en la que se comprometieron a desarrollar los lazos entre sus naciones.
Un guardia de honor que incluía soldados montados y una gran multitud de civiles se congregaron en la plaza junto al río Taedong que atraviesa la capital. La escena incluía niños con globos y grandes retratos de los dos líderes con banderas nacionales adornando el Gran Salón de Estudios del Pueblo.
Luego, Kim y Putin se dirigieron al Palacio Kumsusan para las conversaciones de la cumbre, según los medios rusos.
“Valoramos mucho su apoyo constante e inquebrantable a la política rusa, incluida en la dirección ucraniana”, citó la agencia de noticias estatal rusa RIA a Putin diciendo al comienzo de las conversaciones con Kim.
Putin dijo que Moscú está luchando contra la política hegemónica e imperialista de los Estados Unidos y sus aliados, informaron los medios rusos.
Putin llegó al aeropuerto de Pyongyang temprano el miércoles. Después de darle la bienvenida con un abrazo, Kim compartió “pensamientos más profundos” en el trayecto a la casa de huéspedes estatal en Pyongyang, según los medios estatales norcoreanos.
Putin está en su primer viaje a la capital norcoreana en 24 años, una visita que probablemente reformará décadas de relaciones entre Rusia y Corea del Norte en un momento en que ambos países enfrentan un aislamiento internacional.
La asociación entre los países es un “motor para acelerar la construcción de un nuevo mundo multipolar” y la visita de Putin demuestra la invencibilidad y la durabilidad de su amistad y unidad, dijo la agencia de noticias estatal de Corea del Norte KCNA.
Rusia ha utilizado sus cálidas relaciones con Corea del Norte para provocar a Washington, mientras que la fuertemente sancionada Corea del Norte ha obtenido respaldo político y promesas de apoyo económico y comercial de Moscú.
Los Estados Unidos y sus aliados temen que Rusia pueda proporcionar asistencia para los programas de misiles y nucleares de Corea del Norte, que están prohibidos por resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, y han acusado a Pyongyang de proporcionar misiles balísticos y proyectiles de artillería que Rusia ha utilizado en su guerra en Ucrania.
Moscú y Pyongyang han negado las transferencias de armas.
Kim saludó a Putin, estrechándole la mano, abrazándose y hablando junto al avión del líder ruso. Luego, la pareja se trasladó en la limusina Aurus de fabricación rusa de Putin a la Casa de Huéspedes Estatal Kumsusan.
Dado el horario, la bienvenida fue relativamente discreta, con Kim recibiendo al líder ruso en la alfombra roja sin la gran ceremonia que Corea del Norte hizo para el presidente chino Xi Jinping en su visita de 2019.
“Pasando por las encantadoras calles iluminadas de Pyongyang por la noche, los principales líderes intercambiaron sus pensamientos más profundos y abrieron sus mentes para desarrollar de manera más segura las relaciones entre la RPDC y Rusia”, informó KCNA, utilizando las iniciales del nombre oficial de Corea del Norte.
Las fotos de los medios estatales mostraron calles de Pyongyang llenas de retratos de Putin y la fachada del incompleto y vacante Hotel Ryugyong de 101 pisos en forma de pirámide iluminada con un mensaje gigante “Bienvenido Putin”.
‘Mecanismo de comercio alternativo’
La agenda del miércoles incluye discusiones individuales entre los dos líderes, así como un concierto de gala, una recepción estatal, guardias de honor, firmas de documentos y una declaración a los medios, citó la agencia de noticias Interfax de Rusia al asesor de política exterior de Putin, Yuri Ushakov.
Como señal de que Rusia, un miembro con derecho a veto del Consejo de Seguridad de la ONU, está reevaluando su enfoque hacia Corea del Norte, Putin elogió a Pyongyang antes de su llegada por resistir lo que él dijo que era la presión económica, el chantaje y las amenazas de Estados Unidos.
En un artículo en la primera página del diario principal del partido gobernante de Corea del Norte, prometió “desarrollar mecanismos de comercio y liquidación mutuos alternativos no controlados por Occidente” y “construir una arquitectura de seguridad igual e indivisible en Eurasia”.
El artículo de Putin implica que hay una oportunidad para el crecimiento económico de Corea del Norte dentro de un bloque económico antioccidental liderado por Rusia, un mensaje que probablemente sea atractivo para Kim Jong Un, escribió Rachel Minyoung Lee, analista del programa 38 North en Washington.
“Si Pyongyang ve a Rusia como un socio viable a largo plazo para mejorar su economía, tan irracional como pueda parecer para algunos, hay aún menos incentivos para intentar mejorar las relaciones con Estados Unidos”, dijo en un informe.
Putin también emitió una orden presidencial en vísperas de la visita diciendo que Moscú estaba buscando firmar un “tratado de asociación estratégica integral” con Corea del Norte. Ushakov dijo que incluiría temas de seguridad.
Ushakov dijo que el acuerdo no estaría dirigido contra ningún otro país, sino que “esbozaría perspectivas para una mayor cooperación”.
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