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Se han llevado a cabo manifestaciones en toda Venezuela y en ciudades de todo el mundo
Los seguidores de la oposición se han reunido en toda Venezuela para protestar contra la victoria disputada de Nicolás Maduro en las elecciones presidenciales del mes pasado.
La líder de la oposición, María Corina Machado, se unió a miles de manifestantes en la capital, Caracas, y les instó a no tener miedo.
La Sra. Machado, que había estado escondida después de ser acusada de insurrección, dijo que no había nada por encima de la voz del pueblo, y que el pueblo había hablado.
La policía y el ejército fueron desplegados en fuerza mientras los seguidores del Sr. Maduro también celebraban una manifestación.
“No abandonaremos las calles,” les dijo la Sra. Machado a los manifestantes, muchos de los cuales agitaban copias de actas electorales de sus mesas de votación como prueba de victoria.
Ella había pedido protestas en todo el país para intensificar la presión sobre el Sr. Maduro para que cediera.
El Sr. Maduro insistió en que había ganado un tercer mandato de seis años, pero la oposición publicó cifras que mostraban que su candidato, Edmundo Gonzalez, había ganado por amplio margen.
Hablando desde una ubicación no identificada, el Sr. Gonzalez dijo que era hora de una “transición ordenada”.
La comisión electoral, controlada por aliados del Sr. Maduro, se ha negado a publicar resultados detallados, pero declaró que él ganó con el 52% de los votos. Los observadores independientes dijeron que faltaba transparencia.
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Miles de seguidores del Sr. Maduro también se reunieron en la capital y en otras ciudades
Desde las elecciones, han estallado protestas antigubernamentales y cientos de personas han sido arrestadas por las fuerzas de seguridad, que siguen siendo leales al presidente Maduro.
Según el gobierno venezolano, más de 2.400 personas han sido detenidas desde el 29 de julio, el día en que se anunció el resultado electoral disputado.
La ONU denunció que las protestas callejeras y las críticas en las redes sociales han sido recibidas con una “represión feroz” por parte del estado.
Se han celebrado manifestaciones similares en ciudades de todo el mundo, desde Australia hasta España y también en Reino Unido, Canadá, Colombia, México y Argentina.
La Unión Europea, los Estados Unidos y varios países latinoamericanos se han negado a reconocer el resultado.