Resumen
La tendencia a largo plazo en el mercado de valores de Estados Unidos ha sido al alza. En los más de 40 años desde que Ronald Reagan se convirtió en presidente en 1980, las acciones han tenido un desempeño rentable casi el 80% del tiempo. La ganancia anual promedio ha sido del 13%. Este año fue otro ganador, ya que las acciones en 2024 extendieron un mercado alcista que comenzó en octubre de 2022. El rally fue desencadenado por la caída de la inflación y ha sido impulsado por tasas de interés más bajas, un crecimiento económico consistente y tasas de crecimiento de beneficios corporativos en aumento. Pero a pesar de las tendencias históricas, no hay garantía de que 2025 también sea un éxito. El comienzo del año puede ser difícil, ya que la Reserva Federal lucha contra una inflación persistente, el entorno laboral potencialmente se debilita desde una posición históricamente sólida, y los problemas geopolíticos están latentes. Pero se espera que el crecimiento de las ganancias se acelere a una tasa de un dígito bajo año tras año durante la primera mitad. Y si la inflación reanuda su descenso, dándole al banco central más margen para recortar las tasas, el panorama para la segunda mitad debería mejorar. Creemos que el mercado de valores tomará sus señales de dos fuentes en 2025. La primera es la Reserva Federal, que ha estado al mando de esta segunda etapa del mercado alcista desde que cambió su perspectiva sobre las tasas. La segunda será el crecimiento de las ganancias, que ya es sólido pero podría recibir un impulso en 2025 gracias a las nuevas políticas de Donald Trump. Al menos es un consuelo modesto que el.