Funcionarios de EE. UU. dicen que Ucrania debería seguir desarrollando formas innovadoras de atacar a las fuerzas rusas a medida que la guerra se acerca a su tercer año. Sin embargo, el uso por parte de Ucrania de un misil Patriot para derribar un avión el mes pasado es un ejemplo de cómo las tácticas novedosas en el campo de batalla pueden estar llenas de peligro, así como también de promesas.
Según funcionarios de EE. UU., sin saberlo el objetivo del avión ruso que atacaron puede haber sido transportar prisioneros de guerra ucranianos.
El Patriot es un sistema defensivo, que normalmente se usa para proteger una ubicación y no para derribar aviones. Según funcionarios estadounidenses informados sobre el incidente, un socio europeo proporcionó el interceptor Patriot que alcanzó al avión de carga ruso Ilyushin-76 el 24 de enero.
Los funcionarios rusos afirmaron de inmediato que el avión transportaba a 65 prisioneros de guerra ucranianos, que serían intercambiados por miembros del servicio ruso.
Públicamente, los funcionarios estadounidenses no comentarán sobre lo que derribó el avión, aunque funcionarios que hablaron en privado bajo condición de anonimato dijeron que los informes sobre el uso de un misil Patriot eran precisos.
La cuestión de quién estaba en el avión es menos clara. Los funcionarios estadounidenses no han confirmado las identidades de los pasajeros, pero dijeron que parecía probable que al menos algunos de ellos fueran prisioneros ucranianos. Funcionarios de EE. UU. y Ucrania dicen que Rusia podría haber exagerado el número de muertes.
Si hubiera prisioneros en el avión, como parece probable, los funcionarios estadounidenses dijeron que la pérdida de vidas fue lamentable.
Ucrania parece haber actuado basándose en inteligencia legítima pero defectuosa. Según funcionarios occidentales informados sobre la inteligencia, el avión había sido utilizado previamente para transportar misiles, lo que lo convirtió en un objetivo de alto valor para Kiev.
Aunque el Patriot fue disparado desde Ucrania, el avión de carga se estrelló en Rusia. Algunos funcionarios estadounidenses dicen que han alentado a Ucrania a atacar mucho más allá de las líneas del frente, pero solo en territorio ucraniano, conscientes del riesgo de escalada si se utilizan equipos fabricados en EE. UU. en ataques en territorio ruso.
Sin embargo, los funcionarios estadounidenses no han criticado a Ucrania por usar el sistema Patriot para apuntar a aeronaves rusas en general. En su lugar, han dicho que este es el tipo de innovación que Ucrania necesitará abrazar.
El mes pasado, los planificadores militares estadounidenses se reunieron con sus homólogos ucranianos en Wiesbaden, Alemania, para discutir las nuevas tácticas que podrían ayudar a cambiar las dinámicas de la guerra, que ha estado en un punto muerto durante el último año.
Una de las preguntas es si las operaciones con los Patriots son sostenibles, especialmente si el Congreso corta futura ayuda militar a Ucrania. El Servicio de Investigación del Congreso estima que cada interceptor tiene un costo de $4 millones. Si no hay más financiamiento estadounidense disponible, es probable que los suministros de defensa aérea se vean afectados.
El Patriot fue diseñado originalmente para atacar aeronaves, pero fue reacondicionado después de la Guerra del Golfo para ser utilizado principalmente para atacar misiles balísticos tácticos, a medida que estas armas cobraban prevalencia e importancia en el campo de batalla.
Los ucranianos han llevado el Patriot de vuelta a sus orígenes como arma antiaérea. En enero, creyendo que el avión de carga ruso estaba cargado de misiles, los ucranianos prepararon una emboscada para él. Movieron un lanzador de Patriot más cerca de la frontera y luego dispararon un interceptor cuando el avión de carga estuvo al alcance. Las tácticas, según funcionarios de EE. UU., son creativas pero no revolucionarias.
Los funcionarios ucranianos idearon por primera vez el plan de utilizar los Patriots contra aviones la primavera pasada, en parte para intentar frenar los bombardeos aéreos rusos. El 13 de mayo, los ucranianos llevaron secretamente un sistema Patriot a una zona cerca de la frontera rusa y derribaron cinco aviones.
Después de esa operación, Ucrania trasladó secretamente un sistema Patriot al sur, donde fue utilizado para derribar un Su-35, un avión de combate ruso, sobre el Mar Negro.
Solo meses después, en noviembre, Ucrania confirmó las operaciones, argumentando que el uso del Patriot, al menos por un tiempo, había disuadido las operaciones rusas.
“Se abstuvieron de volar allí un tiempo porque entendieron que era peligroso, y podrían ser derribados”, dijo Yurii Ihnat, un portavoz de la fuerza aérea, a los periodistas en Ucrania. “El sistema Patriot proporciona tales capacidades.”
Durante el invierno, el ritmo de las operaciones ha vuelto a aumentar. En diciembre, los ucranianos afirmaron haber derribado cinco aviones de combate rusos.
El presidente Volodymyr Zelensky dijo que las operaciones establecieron “el estado de ánimo adecuado para todo el próximo año,” prometiendo más por venir. Aunque los ucranianos no ofrecieron detalles sobre cómo derribaron los aviones en diciembre, analistas militares dijeron que probablemente se usaron misiles Patriot.
El comandante de una batería Patriot, en una entrevista con The New York Times en diciembre, dijo que el efecto disuasorio de una batería Patriot era significativo.
“Cuando los pilotos saben que hay un Patriot en alguna parte del área, pensarán diez veces si ir allí a trabajar o no”, dijo el comandante, insistiendo en que solo se utilizara su primer nombre, Volodymyr, por razones de seguridad.
Si bien se negó a discutir operaciones específicas, dijo que “el Patriot ya ha mostrado su alcance, un alcance realmente largo, que le permite derribar estas aeronaves.”
Michael Schwirtz en Nueva York, Anton Troianovski en Berlín, Thomas Gibbons-Neff en Londres y Eric SchmittIn en Washington contribuyeron a este reportaje.