El presidente de Colombia, Gustavo Petro, está siendo criticado por grupos defensores de la libertad de prensa después de hacer comentarios sobre las periodistas, llamándolas “muñecas de la mafia” en uno de los países más peligrosos para los periodistas en América del Sur. Sin embargo, Petro se ha defendido, diciendo que se refería a “periodistas mujeres del establishment… contratadas por poderes oscuros”. A pesar de sus explicaciones, la indignación persiste y se ha presentado una petición para que se disculpe por sus comentarios.