El Gobierno de Bélgica en 2019 emitió una disculpa formal a aproximadamente 20,000 víctimas de separaciones familiares forzadas en la R.D. Congo, así como en Burundi y Ruanda. La R.D. Congo fue gobernada por Bélgica como colonia desde 1908 hasta 1960. Monique Bitu Bingi, Léa Tavares Mujinga, Noëlle Verbeken, Simone Ngalula y Marie-José Loshi presentaron un caso legal por compensación en 2021. Fueron todos tomados por el estado antes de los siete años y colocados en orfanatos, principalmente administrados por la Iglesia Católica. Bitu Bingi había dicho anteriormente a la agencia de noticias AFP: “Fuimos destruidos. Las disculpas son fáciles, pero cuando haces algo tienes que hacerte responsable de ello.” Su lucha legal tuvo éxito el lunes en el Tribunal de Apelación de Bruselas, que revocó un fallo anterior que encontró que había pasado demasiado tiempo para que fueran elegibles para reparaciones. Mientras que el tribunal consideró las acciones del estado como un crimen contra la humanidad, esto eliminó cualquier estatuto de limitaciones. “El tribunal ordena al Estado belga compensar a los apelantes por el daño moral resultante de la pérdida de su conexión con su madre y el daño a su identidad y su conexión con su entorno original”, dijeron los jueces. Las mujeres pidieron un pago inicial de 50,000 euros. Este es el primer caso en Bélgica que ha puesto de manifiesto los aproximadamente 20,000 niños nacidos de colonos blancos y mujeres negras locales que fueron sacados a la fuerza de sus familias durante los años 40 y 50. La mayoría de los padres blancos se negaron a reconocer a sus hijos de raza mixta o a aceptar la paternidad, y los niños tampoco recibieron automáticamente la nacionalidad belga. Como tal, fueron llevados a cuidado estatal y colocados en orfanatos dirigidos por la Iglesia, donde en muchos casos sufrieron abusos adicionales. En 2017, la Iglesia Católica se disculpó con las víctimas por su participación en el escándalo. Y en 2019, el gobierno belga se disculpó por su participación como parte de un “paso hacia la conciencia y el reconocimiento de esta parte de nuestra historia nacional.”
