Un juez de distrito de los Estados Unidos ha emitido una orden judicial permanente contra Google, obligando a la compañía a permitir que las tiendas de aplicaciones de terceros tengan acceso a la biblioteca de Google Play y a hacer que esas tiendas de aplicaciones alternativas estén disponibles para su descarga en la Play Store. Esta decisión llega después de una batalla antimonopolio de cuatro años con Epic Games. Google ha declarado que apelará la orden judicial, citando preocupaciones sobre la competencia con Apple y posibles riesgos de seguridad. La orden judicial también afecta las prácticas de facturación. Google ya no puede exigir a los desarrolladores que utilicen su sistema de facturación ni impedirles informar a los usuarios sobre opciones de pago más baratas. Además, Google no puede realizar acuerdos para lanzar aplicaciones de forma exclusiva en Google Play o preinstalar su tienda en nuevos dispositivos. Un comité de tres personas, formado por Google y Epic Games, supervisará el cumplimiento de Google y abordará cualquier problema técnico derivado de la orden judicial. Google ha expresado su desacuerdo con la decisión, argumentando que la plataforma abierta de Android ya proporciona a los desarrolladores diversas opciones de distribución de aplicaciones.
Cómo comenzó todo
En diciembre, un jurado encontró que la tienda de aplicaciones de Google estaba en violación de las leyes antimonopolio de EE. UU., afirmando que la empresa tenía un monopolio ilegal en la distribución de aplicaciones y facturación dentro de las aplicaciones para dispositivos Android. El jurado también concluyó que los acuerdos de Google con otras compañías de juegos y fabricantes de dispositivos eran anticompetitivos. Es importante destacar cómo esta orden judicial difiere de la demanda de Epic Games contra Apple. Si bien ambos casos se centraron en preocupaciones antimonopolio y prácticas de tiendas de aplicaciones, los resultados fueron significativamente diferentes. En el caso de Apple, el tribunal se pronunció en gran medida a favor de la empresa, manteniendo el control de Apple sobre su App Store y sistemas de pago dentro de las aplicaciones.
Esta diferencia probablemente se deba a la diferencia fundamental entre iOS y Android: iOS es un ecosistema cerrado (al menos en los Estados Unidos), mientras que Android permite la carga lateral y tiendas de aplicaciones alternativas. Esta distinción jugó un papel clave en la decisión del tribunal, destacando la mayor flexibilidad y apertura de la plataforma Android. Este último punto está siendo desafiado actualmente por Epic, con una demanda que recientemente fue presentada contra Google y Samsung, argumentando cómo ambas compañías están dificultando el proceso de carga lateral.
Google responde y advierte sobre posibles consecuencias negativas no deseadas
Google ha respondido a la orden judicial, afirmando que los cambios ordenados pondrían en peligro la privacidad y seguridad del consumidor, obstaculizarían la capacidad de los desarrolladores para promocionar sus aplicaciones y frenarían la competencia entre los fabricantes de dispositivos. La empresa cree que estos cambios, aunque puedan satisfacer a Epic Games, traerán consecuencias no deseadas que impactarán negativamente a los consumidores estadounidenses, los desarrolladores y los fabricantes de dispositivos. Google sostiene que la decisión contradice la sentencia anterior en el caso similar que Epic presentó contra Apple, a pesar de que Android es una plataforma abierta que siempre ha permitido la elección y flexibilidad, incluidas múltiples tiendas de aplicaciones y carga lateral. La empresa planea apelar la decisión y buscar una pausa en los cambios solicitados por Epic mientras se resuelve la apelación.
La apelación de Google se centrará en varios argumentos clave:
Competencia directa con Apple por los consumidores: Google sostiene que la decisión clasifica erróneamente a Android como un mercado separado, mientras que la sentencia sobre Apple reconoció correctamente que Android y iOS compiten dentro del mismo mercado. Competencia directa con Apple por los desarrolladores de aplicaciones: Google enfatiza que los desarrolladores priorizan la creación de aplicaciones para iOS y Android debido a recursos limitados. Tanto Google como Apple invierten en herramientas y programas para atraer a los desarrolladores a sus respectivas plataformas. Apertura de Android y distribución de aplicaciones alternativas: Google destaca que Android es una plataforma abierta que ofrece a los desarrolladores múltiples opciones de distribución de aplicaciones, incluidas tiendas de aplicaciones preinstaladas en dispositivos y descargas directas desde sitios web.
Google sostiene que Android ha fomentado la elección, reducido los precios y democratizado el acceso a teléfonos inteligentes y aplicaciones. La empresa cree que la decisión inicial y los cambios solicitados por Epic amenazan estos logros y socavan la capacidad de Android para competir con iOS de Apple. La empresa también sostiene que sigue comprometida con abogar por el mejor interés de los desarrolladores, los fabricantes de dispositivos y los usuarios de Android en todo el mundo.
Esta noticia es ciertamente interesante desde la perspectiva del consumidor. Una mayor competencia en el mercado de tiendas de aplicaciones podría llevar a precios más bajos y más opciones para los usuarios. Sin embargo, también plantea preocupaciones válidas sobre seguridad y fragmentación. Será interesante ver cómo se desarrolla esto en los próximos años y qué impacto tendrá en el ecosistema de Android.