El Ministro de Defensa israelí Yoav Gallant advirtió el domingo a Irán y a la milicia libanesa Hezbollah que eviten ataques de represalia contra Israel, ya que Hezbollah afirmó que atacó una base de entrenamiento israelí con drones.
“Quien nos dañe de una manera que no haya ocurrido previamente probablemente será golpeado de una manera que no haya ocurrido previamente”, dijo Gallant, argumentando que Israel está luchando por su existencia en un entorno hostil.
Israel se está preparando para un ataque tras los asesinatos en días recientes de dos opositores líderes israelíes: un comandante de Hezbollah en Beirut y el líder político del grupo militante palestino Hamas, Ismail Haniyeh, en Teherán.
“Espero que lo piensen bien y no lleguen a un punto en el que nos obliguen a causar un daño significativo y aumentar la probabilidad de que estalle la guerra en otros frentes”, dijo Gallant.
“No queremos eso, pero debemos estar preparados”, añadió.
Anteriormente, Hezbollah dijo que utilizó “enjambres de drones de asalto en la base Mahava Alon” en el norte de Israel el sábado por la noche, “logrando un impacto directo y causando bajas confirmadas.”
El ataque fue en respuesta al asesinato de Samer al-Haj, miembro de Hamas, el viernes en la ciudad portuaria libanesa de Sidón
Hezbollah también dijo que atacó a un grupo de soldados israelíes cerca de la frontera.
El ejército israelí confirmó que los drones volaron sobre territorio israelí desde Líbano. Uno fue interceptado y otros se estrellaron, con daños pero no se reportaron heridos, dijo el ejército.
Se ha esperado un fuerte ataque de Hezbollah contra Israel, tal vez en coordinación con un ataque de Irán.
El líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, ha jurado venganza tras el asesinato selectivo del comandante militar de Hezbollah, Fuad Shukr, en Beirut el 30 de julio. La muerte de Haniyeh en la capital iraní el 1 de agosto, llevó al liderazgo en Teherán a jurar también venganza contra Israel, al que culpó por el ataque.