Mali dice que ha cortado las relaciones diplomáticas con Ucrania, después de que un oficial militar sugiriera que Kyiv había tenido un papel en los combates mortales cerca de la frontera argelina el mes pasado.
Decenas de soldados malienses y mercenarios del grupo Wagner de Rusia murieron en días de combates con rebeldes separatistas tuareg y combatientes vinculados a Al-Qaeda.
Andriy Yusov, un portavoz de inteligencia militar ucraniana, dijo la semana pasada que los rebeldes habían recibido la “información necesaria” para llevar a cabo los ataques.
Un alto funcionario maliense, el coronel Abdoulaye Maiga, dijo que su gobierno estaba impactado al escuchar la afirmación y acusó a Ucrania de violar la soberanía de Mali.
Los comentarios de Yusov “admitieron la participación de Ucrania en un ataque cobarde, traicionero y bárbaro por grupos terroristas armados” que habían provocado la muerte de soldados malienses, dijo el comunicado del Coronel Maiga.
Mali ha decidido cortar relaciones “con efecto inmediato”, dijo.
La semana pasada, el ejército de Mali admitió que había sufrido “pérdidas significativas” durante varios días de combates que estallaron el 25 de julio.
Los enfrentamientos tuvieron lugar en el desierto cerca de Tinzaouaten, una ciudad del noreste en la frontera con Argelia.
Informes dicen que las fuerzas malienses y rusas fueron emboscadas por rebeldes tuareg y combatientes de la afiliada a Al-Qaeda Jamaat Nusrat al-Islam wal-Muslimin mientras esperaban refuerzos, después de retirarse de Tinzaouaten.
Ni el ejército de Mali ni Wagner, que desde entonces se ha transformado en un grupo llamado el Cuerpo de África, han dado cifras exactas, pero la cifra estimada de muertes de los combatientes de Wagner va desde 20 a 80.
Se cree que las pérdidas del grupo mercenario ruso son las más pesadas que ha sufrido en Mali desde que comenzó a ayudar al gobierno militar a combatir a los insurgentes hace dos años.
Wagner ha reconocido que uno de sus comandantes fue asesinado y que un helicóptero ruso fue derribado en “feroces combates”, diciendo que habían sido atacados por alrededor de 1,000 combatientes.
Los separatistas tuaregs afirmaron el jueves que habían matado a 84 mercenarios de Wagner y a 47 soldados malienses.
Hace más de una década, el gobierno central de Mali perdió el control de gran parte del norte tras una rebelión tuareg, que fue provocada por la demanda de un estado separado.
La seguridad del país se complicó aún más por la participación de militantes islamistas en el conflicto.
Cuando se hicieron con el poder en los golpes de estado de 2020 y 2021, los militares citaron la incapacidad del gobierno para hacer frente a esta inestabilidad.
La nueva junta rompió la alianza de Mali con la antigua potencia colonial Francia en favor de Rusia, en un intento de sofocar la agitación.