¿Qué pasaría si alguien te dijera que las sirenas son reales? Olvida las colas de pescado, nos referimos a mujeres capaces de contener la respiración durante minutos mientras bucean bajo el mar varias veces al día. Estos son los buceadores haenyeo de Corea del Sur, una comunidad de mujeres de la isla Jeju que han estado buceando (sin oxígeno) para recolectar mariscos durante siglos. Ahora, con la mayoría de ellas en sus 60, 70 y 80 años, sus tradiciones y forma de vida están en peligro ya que menos mujeres jóvenes se unen a la profesión, y con la posibilidad de que el océano cambie más allá de su reconocimiento. Estos son los hechos que llevaron a la cineasta estadounidense-coreana Sue Kim a colaborar con la defensora de la educación femenina y ganadora del Premio Nobel de la Paz, Malala Yousafzai, para compartir su historia con el mundo. La hija de inmigrantes coreanos, Kim, nacida en EE. UU., conoció por primera vez a las haenyeo cuando era niña, de vacaciones en Corea del Sur. “Me impactaron tanto por las mismas razones que se ven en la película: eran tan increíblemente audaces y vibrantes y seguras de sí mismas. También eran muy ruidosas… peleaban y reían, y desprendían una energía muy grande y ocupaban su espacio sin disculpas”, dice Lee. “Simplemente me enamoré de toda esa vibra y gran energía cuando era pequeña. Y crecí fascinada por ellas. Eran una versión de la feminidad coreana que me inspiraba y quería emular”, añade. “Me sorprendió tanto no saber sobre las haenyeo, como muchas personas no sabían, que dije que sí de inmediato”, explica Malala, quien fue productora de la película.