El presidente francés Emmanuel Macron está planeando una visita a Mayotte, un pequeño grupo de islas en el Océano Índico, después de los devastadores efectos del ciclón Chido en el territorio de ultramar francés.
El martes por la noche en X, Macron dijo que tiene la intención de hacer el viaje en los próximos días “para apoyar a nuestros compatriotas, a los funcionarios y a los servicios de emergencia”. También tiene previsto declarar luto nacional.
En un informe preliminar el martes por la noche, las autoridades informaron que hubo 21 muertes y más de 1,400 heridos, informó la emisora France Info.
Se espera que el número final de muertos se confirme solo después de varios días. El domingo por la noche, el prefecto local François-Xavier Bieuville mencionó que podría haber cientos, si no miles de muertes.
El ciclón Chido arrasó Mayotte el sábado con ráfagas de tormenta que alcanzaron velocidades de más de 220 kilómetros por hora, dejando un rastro de destrucción. Muchas viviendas empobrecidas fueron destruidas. Miles de hogares se encuentran sin electricidad y también hay problemas con el suministro de agua y la red telefónica. Las carreteras están bloqueadas y algunas áreas están incomunicadas.
El territorio de ultramar francés de Mayotte se encuentra en el Océano Índico entre la costa del país africano del sureste de Mozambique y la nación insular de Madagascar.
Aproximadamente 310,000 personas viven en el archipiélago. El ciclón Chido azotó Mayotte el sábado con ráfagas de más de 220 kilómetros por hora, dejando un rastro de devastación.
Los socorristas en el territorio de ultramar buscaron urgentemente sobrevivientes el lunes.
El coronel Alexandre Jouassard del Centro de Crisis Interministerial le dijo al canal de televisión pública France 2 que todavía hay esperanza de encontrar personas con vida. “Las próximas horas son muy importantes. Hemos desplegado equipos especializados en la búsqueda entre los escombros”, dijo Jouassard.
Incluso varios días después de la tormenta, aún se pueden encontrar víctimas, agregó, “esta es nuestra prioridad”.
Mientras tanto, la prestación local de servicios de salud es un desafío. La ministra de Salud interina de Francia, Geneviève Darrieussecq, describió la situación en France 2 como “gravemente deteriorada, con un hospital severamente dañado y centros de salud no funcionales”.
Subrayó la necesidad de vigilancia respecto a enfermedades transmisibles, que podrían surgir del consumo de agua contaminada o alimentos en mal estado.
Desde que azotó Mayotte, Chido ha llegado a Mozambique en el continente africano, donde la tormenta alcanzó velocidades de hasta 240 kilómetros por hora.
Según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), destruyó y dañó numerosas viviendas, escuelas y centros de salud en la provincia norte de Cabo Delgado.