Opacadas por la guerra en Ucrania y con la oposición excluida, Rusia continuó su elección presidencial el sábado para mantener al presidente ruso Vladimir Putin en el poder.
Para la tarde del segundo de los tres días de votación, la comisión electoral central de Rusia anunció una participación del electorado de más del 50%. Sin embargo, los observadores señalaron evidencia de fraude y manipulación, con informes de que se urgió a los empleados estatales en particular a votar en masa.
Antes de una protesta planeada el domingo, los opositores de Putin en Moscú también reportaron recibir mensajes amenazantes.
A las 4 pm en Moscú (1300 GMT) del sábado, más de uno de cada dos votantes elegibles ya había emitido su voto ya sea en un centro de votación o en línea, según informó el vicepresidente de la comisión electoral, Nikolai Bulayev, según la agencia de noticias Interfax.
La participación de los votantes es una cifra importante para el Kremlin para que Putin pueda mostrar en última instancia que la mayoría de la población supuestamente lo apoya activamente a él y a su guerra contra Ucrania. Según datos de los encuestadores estatales, el Kremlin apunta a una participación de más del 70%.
Sin embargo, según informes de observadores independientes, se instó a los empleados de empresas estatales a votar en gran número. Cientos de empresas ya han publicado fotos grupales de sus empleados frente a los respectivos centros de votación en las redes sociales. También se mostraron videos de personas siendo llevadas en autobuses a los centros de votación.
También hubo informes de una gran presión ejercida sobre personas ucranianas, que se supone deben participar en las votaciones en los territorios de Ucrania ocupados por Rusia, lo cual es ilegal según el derecho internacional y por lo tanto no reconocido fuera de Rusia.
La votación en Rusia está destinada a asegurar a Putin un quinto mandato en el cargo de presidente y está programada para continuar hasta el domingo por la noche a las 1800 GMT.
El presidente ruso de 71 años no tiene opositores reales. Figuras de oposición serias no han sido autorizadas como candidatos, han huido al extranjero o están en campos de prisioneros. Los opositores del Kremlin, por lo tanto, convocan protestas.