La idea de que los combustibles fósiles tienen un futuro a largo plazo en la economía global es anatema para muchos ecologistas que asisten a la cumbre sobre el clima organizada en los Emiratos Árabes Unidos. Sin embargo, para dos primeros ministros canadienses que también están asistiendo, la idea es fundamental, y la conferencia es un lugar ideal para convertir a más seguidores.
Danielle Smith, la primera ministra de Alberta, y Scott Moe, su homóloga en Saskatchewan, participan en las reuniones con el objetivo de promover el desarrollo continuo del petróleo y el gas. Fueron acompañados por un gran contingente de representantes de la industria del petróleo y el gas de Canadá. Según Environmental Defence, con sede en Toronto, se calcula que 35 personas vinculadas a la industria de los combustibles fósiles formaron parte de la delegación de Canadá, todas incluidas por Alberta.
La participación de defensores de los combustibles fósiles en la cumbre sobre el clima y su ubicación en los Emiratos Árabes Unidos, un país cuya economía se basa casi por completo en la venta de combustibles fósiles, ha despertado dudas sobre la credibilidad de las negociaciones, informó mi colega Vivian Nereim.
Un documento interno filtrado también mostró que los Emiratos tenían otro objetivo para la reunión: promover acuerdos de petróleo y gas en todo el mundo. [Leer: Los archivos sugieren que el líder de la cumbre sobre el clima está utilizando el evento para promover los combustibles fósiles]
Luego, apareció un video mostrando a Sultan Al Jaber, el ejecutivo petrolero emiratí que está liderando la conferencia, diciendo que “no hay ciencia” que respalde la idea de que los combustibles fósiles deben ser eliminados para evitar que las temperaturas globales promedio suban más de 1,5 grados Celsius sobre los niveles preindustriales, el punto más allá del cual los científicos dicen que los efectos del calentamiento global serán abrumadores. [Leer: El líder de la cumbre sobre el clima trata de calmar la indignación por un comentario sobre los combustibles fósiles]
El Sr. Al Jaber se mostró desafiante y sugirió en una conferencia de prensa que no había dicho lo que capturó el video. Aún es demasiado pronto para decir si el acuerdo al que están presionando científicos, ecologistas y docenas de líderes mundiales, que llevaría a una rápida reducción en la producción de petróleo, realmente se concretará. [Leer: Gran petróleo contra la ciencia en la cumbre de la ONU sobre el clima]
La cumbre, que se celebra al final del año más caluroso de la historia registrada, no termina hasta el martes. Sin embargo, es probable que aquellos que piden que el texto final incluya un lenguaje inequívoco sobre la eliminación rápida de los combustibles fósiles, queden decepcionados. Según las reglas de la ONU, cualquiera de los 170 países presentes en la reunión puede descarrilar cualquier acuerdo. Los Estados del Golfo, entre otros, han dicho que no aceptarán una propuesta para acabar con la industria que les ha proporcionado una riqueza desproporcionada.
Andrea Hill informó desde Ottawa que el gobierno federal presentó un componente clave de su plan climático para la industria del petróleo y el gas, que es la mayor fuente de emisiones de gases de efecto invernadero del país. El anuncio convierte a Canadá en el primer gran productor de petróleo y gas en establecer un límite a las emisiones del segmento. Según el plan del gobierno, el sector energético obtendrá un respiro de los requisitos para recortar las emisiones en comparación con otras industrias. El objetivo climático general de Canadá exige reducciones, para 2030, del 40 al 45 por ciento por debajo de los niveles de 2005. Sin embargo, la industria del petróleo y el gas solo tendrá que alcanzar un 35 al 38 por ciento por debajo de los niveles de 2019 para la misma fecha límite. Las empresas que no cumplan con estas reducciones podrán comprar compensaciones de industrias que hayan reducido la producción.
Si bien la mayoría de los ecologistas elogiaron el límite, muchos desean que la versión final de las regulaciones incluya más reducciones, y no todos están de acuerdo con permitir que las empresas se libren de las reducciones comprando su camino.
La Asociación Canadiense de Productores de Petróleo, un grupo de presión de la industria, declaró que el límite a las emisiones era “efectivamente un límite a la producción”, algo que Smith y Moe han jurado bloquear desde hace mucho tiempo. El gobierno federal estima que las empresas de petróleo y gas podrán aumentar la producción en un 12 por ciento y aún cumplir los objetivos de emisión.
Smith y Moe, empoderados por recientes reveses judiciales para algunas leyes ambientales federales, dijeron en declaraciones que lucharán contra el sistema en los tribunales por considerarlo una intrusión inconstitucional en la jurisdicción provincial.
“Justin Trudeau y su ministro del medio ambiente y cambio climático ecoextremista, Steven Guilbeault, están arriesgando cientos de miles de millones de inversiones en la economía de Alberta y Canadá”, dijo Smith. (El Partido Conservador Unido de Smith no ha cumplido con su promesa de derogar una ley provincial introducida por el gobierno de Nuevo Partido Democrático anterior que establece techos a las emisones de las arenas petrolíferas.)
Quizás una amenaza aún mayor para el límite sea el tiempo. Trudeau prometió el límite hace dos años durante el proceso electoral. No entrará en vigencia antes de 2026 como muy pronto. Esto sería después de la próxima votación federal, que puede no ser favorable a su partido Liberal.
Si los Conservadores bajo Pierre Poilievre toman el poder después de esa elección, pocos dudan de que Poilievre revocará el límite de emisiones de la industria energética. Y de hecho, poco después del anuncio del gobierno, Poilievre aceleró una serie de votaciones que duraron toda la noche. Prometió mantener atascada a la Cámara de los Comunes con ellas hasta Navidad a menos que Trudeau eliminara algunos impuestos sobre el carbono.
Trans Canada
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