El sábado, los houthis aliados de Irán en Yemen dijeron que habían apuntado al aeropuerto de Ben Gurion en Israel con un misil balístico y que habían sincronizado el ataque para que coincidiera con la llegada del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu.
El presunto ataque fue anunciado horas después de que el movimiento libanés Hezbollah, aliado de los houthis, confirmara la muerte de su líder Hassan Nasrallah en un ataque aéreo en los suburbios del sur de Beirut.
El portavoz militar houthi, Yehya Saree, dijo que el grupo no “dudará en elevar el nivel de escalada militar” contra Israel.
“Estas operaciones no se detendrán hasta que cese la agresión contra Gaza y Líbano”, agregó Saree en un comunicado televisado.
El viernes, los houthis afirmaron dos ataques, incluido un misil balístico dirigido a Israel en apoyo de sus aliados palestinos y libaneses.
Tras un fatal ataque con drones en Tel Aviv por parte de los houthis, la Fuerza Aérea Israelí atacó la ciudad portuaria de Hodeidah en julio, lo que provocó un gran incendio y seis muertes. Los líderes houthis anunciaron posteriormente una nueva fase en la lucha contra Israel.
Los militantes houthis también han estado atacando barcos en el Mar Rojo, diciendo que los ataques están destinados a apoyar al grupo islamista palestino Hamas y forzar el fin de los ataques israelíes en la Franja de Gaza.