Los helicópteros militares estadounidenses fueron atacados por combatientes houtíes respaldados por Irán en el Mar Rojo el domingo por la mañana y respondieron a los disparos, hundiendo tres barcos houtíes y matando a los tripulantes, informó el Comando Central de EE. UU.
El episodio ocurrió después de que un buque portacontenedores comercial fuera atacado por combatientes houtíes en pequeños botes y emitiera una llamada de socorro, lo que provocó la respuesta de los helicópteros de la Marina de los EE. UU., según los militares.
“En el proceso de emitir llamadas verbales a las pequeñas embarcaciones, las embarcaciones pequeñas dispararon contra los helicópteros de EE. UU. con armas de fuego de tripulación y armas pequeñas”, dijo el Comando Central en un comunicado en las redes sociales. “Los helicópteros de la Marina de EE. UU. respondieron al fuego en defensa propia, hundiendo tres de los cuatro pequeños barcos y matando a las tripulaciones”.
Fue el incidente más reciente y quizás el más mortífero de los houtíes, que controlan una gran parte del norte de Yemen, desde que Israel fue a la guerra con Hamas el 7 de octubre.
En solidaridad con Hamas, que también es respaldado por Irán, los houtíes han lanzado docenas de ataques con misiles y drones contra buques comerciales y han apresado un buque vinculado a Israel. Los ataques han llevado a Estados Unidos y sus aliados a desplegar buques de guerra en el Mar Rojo, que es crucial para el envío mundial.
A principios de diciembre, el destructor U.S.S. Carney derribó tres drones durante un ataque sostenido de los houtíes a buques comerciales en el Mar Rojo, informó el Pentágono. El ejército de EE. UU. no ha atacado directamente a los houtíes en Yemen, evitando una escalada que podría provocar que la guerra en Gaza inflame aún más Oriente Medio.
El incidente del domingo involucró un buque portacontenedores operado por el gigante naviero Maersk, que transitaba por el sur del Mar Rojo cuando fue atacado por los houtíes, según informaron el Comando Central y Maersk en sendos comunicados.
El buque portacontenedores, el Maersk Hangzhou, informó que había sido alcanzado por un misil alrededor de las 8:30 p.m. del sábado, cuando se encontraba a unas 55 millas náuticas al suroeste de Hudaydah, Yemen. La tripulación “observó un destello en la cubierta”, dijo Maersk en un comunicado por correo electrónico.
Dos buques estadounidenses respondieron a la llamada de socorro del buque, y uno de ellos, el destructor U.S.S. Gravely, “derribó dos misiles balísticos antinavíos disparados desde áreas controladas por los houtíes en Yemen hacia los buques”, dijo el Comando Central en las redes sociales.
No se reportaron heridos, y Maersk dijo que su buque continuó su viaje hacia el norte.
Luego, el domingo por la mañana, cuatro pequeños botes tripulados por houtíes atacaron el buque de Maersk, acercándose a unos 20 metros del buque, e intentaron abordarlo, según el Comando Central en un comunicado posterior. Dijo que oficiales de seguridad habían abierto fuego desde el buque portacontenedores, que emitió una nueva llamada de socorro, y que los helicópteros de Estados Unidos del Gravely y del U.S.S. Eisenhower, un portaaviones, volaron al lugar, donde fueron atacados por los houtíes.
El ejército de EE. UU. no indicó cómo sabía que los miembros de la tripulación de los tres barcos que se hundieron habían muerto. El cuarto bote huyó del área, dijo el Comando Central, agregando que no se había reportado personal de EE. UU. herido ni daños a equipos en el incidente.
El choque se produjo pocos días después de que Maersk anunciara que reanudaría los viajes por el Mar Rojo y el Canal de Suez. Durante aproximadamente una semana antes de ese anuncio, los barcos de la compañía habían evitado la zona debido a preocupaciones de seguridad.
El domingo, Maersk dijo en un comunicado por correo electrónico que pausaría “todos los tránsitos por la zona durante las próximas 48 horas” mientras investiga el ataque y evalúa la seguridad en la vía navegante. La tripulación del Maersk Hangzhou, que viajaba de Singapur a Puerto Saíd, se encontraba a salvo, dijo la empresa.
Según Estados Unidos, el ataque fue el vigésimo tercero que llevaron a cabo los houtíes en unas seis semanas. Los incidentes han llevado a algunas compañías a evitar el Mar Rojo, desviando sus buques alrededor del cabo de Buena Esperanza, lo que provoca un aumento en las tasas de envío a pesar de que los viajes más largos aumentan los retrasos.
No hubo declaraciones inmediatas sobre el incidente por parte de los houtíes.
Estados Unidos anunció este mes que había establecido una fuerza naval para intentar garantizar el paso seguro de los buques comerciales en el Mar Rojo. Los miembros de la iniciativa de seguridad, llamada Operación Prosperity Guardian, incluyen a Bahréin, Gran Bretaña, Francia, Italia y los Países Bajos.