Funcionarios de Israel denunciaron el viernes la orden de la Corte Internacional de Justicia que busca prevenir actos genocidas en su ofensiva contra Hamas en Gaza, pero también expresaron alivio de que la corte no le haya ordenado detener su campaña militar.
Los funcionarios israelíes temían que los jueces ordenaran un alto el fuego inmediato en Gaza, tal como lo había solicitado Sudáfrica en su petición inicial. En última instancia, la corte de la ONU ordenó a Israel actuar para garantizar que sus soldados y líderes cumplieran con la convención de genocidio de la ONU de 1948, pero no exigió el fin de la guerra.
Israel ha rechazado enérgicamente la acusación de que está cometiendo genocidio contra los palestinos en Gaza. Después del fallo provisional del viernes, el primer ministro Benjamin Netanyahu arremetió contra la corte.
“La mera idea de que Israel está perpetrando genocidio no solo es falsa, es escandalosa, y la disposición de la corte de discutirlo es una vergüenza que durará generaciones”, dijo el Sr. Netanyahu.
Pero dijo que la orden de la corte había afirmado el derecho de Israel a protegerse después de los ataques de Hamas el 7 de octubre que lo llevaron a la guerra en Gaza.
“Como cualquier estado, Israel tiene el derecho básico de legítima defensa. La corte rechazó justamente la vergonzosa demanda de anular ese derecho”, dijo el Sr. Netanyahu.
Raz Nizri, ex fiscal general adjunto de Israel, dijo que Israel ya estaba tomando la mayoría de las acciones ordenadas por la corte, como garantizar la provisión de ayuda humanitaria a Gaza y sancionar declaraciones que podrían incitar al genocidio.
“Y no hubo una orden de detener la lucha”, dijo. “Es extremadamente importante que no se haya dado tal orden”.
Muchos israelíes piensan que la acusación de genocidio por parte de Sudáfrica equivale a una inversión de la realidad. Acusan a Hamas, el grupo armado palestino que gobernaba Gaza, de cometer genocidio en su asalto del 7 de octubre, que según las autoridades israelíes mató a unas 1.200 personas. Otros 240 fueron tomados como rehenes por Hamas y otros grupos militantes, muchos de los cuales siguen cautivos en Gaza.
“Ciertamente ha habido intentos de genocidio del pueblo judío por parte de Hamas, los bárbaros nazis”, dijo Bezalel Smotrich, el ministro de Finanzas de extrema derecha de Israel.
Yoav Gallant, ministro de Defensa de Israel, dijo que Israel no necesitaba “que la corte le diera lecciones de moralidad”. Los jueces habían tomado nota de algunos comentarios anteriores del Sr. Gallant, incluido que Israel estaba en guerra con “animales humanos”, al discutir si los funcionarios israelíes habían utilizado retórica genocida.
En su fallo, los jueces de la corte de la ONU se pronunciaron “gravemente preocupados” por el destino de los rehenes y pidieron su liberación inmediata.
La campaña militar de Israel en Gaza ha matado a más de 25.000 personas, según funcionarios de salud palestinos en el enclave. La mayoría de los más de dos millones de habitantes de Gaza han huido de sus hogares huyendo de los ataques aéreos e invasiones terrestres de Israel.