El líder de la oposición de Zimbabwe, Nelson Chamisa, ha presentado su renuncia, afirmando que su partido ha sido “contaminado” y “secuestrado” por el gobierno.
“No tendré nada que ver con la política de alcantarilla”, dijo en una declaración de 13 páginas el jueves.
Obtuvo alrededor del 44% de los votos en las elecciones presidenciales del año pasado que estuvieron plagadas de acusaciones de juego sucio.
Sin embargo, varios diputados de su partido CCC perdieron sus escaños más tarde en lo que el Sr. Chamisa dijo que fue sabotaje.
Se espera que el Sr. Chamisa, un pastor cristiano y abogado de 45 años, funde un nuevo partido. Dijo que “rendirse no es una opción”.
No está claro cuántos de los restantes diputados y concejales del CCC lo seguirán.
Aunque cuenta con un gran apoyo, especialmente en las zonas urbanas, sus críticos dicen que el débil liderazgo del Sr. Chamisa ha generado profundas divisiones en la oposición, lo que solo ha ayudado al presidente Emmerson Mnangagwa a afianzar su poder.
En su carta de renuncia, dijo que el CCC había sido “profanado”, acusando al partido gobernante Zanu-PF de estar detrás del movimiento, acusaciones que este negó.
“La idea original del CCC ha sido, sin embargo, contaminada, bastardizada, secuestrada por ZANU PF a través del abuso de las instituciones estatales”, dijo.
En toda la declaración, el exlíder del CCC culpó al presidente Emmerson Mnangagwa por una serie de problemas que aquejan a Zimbabwe, incluyendo hospitales “trampa mortal”, el brote de cólera y el colapso de los servicios sociales.
Dijo que varias personas de su partido habían sido sobornadas para socavarlo desde adentro.
Haciendo referencia al apodo reptiliano del presidente Mnangagwa, el Sr. Chamisa dijo que se negaba “a nadar en un río con cocodrilos hambrientos”.
El presidente Mnangagwa llegó al poder en 2017 después de un golpe de Estado sin derramamiento de sangre que derrocó al líder de mucho tiempo, Robert Mugabe.
En ese momento era visto como un faro de cambio y esperanza para el país en crisis.
Pero la alta inflación, el desempleo y la censura siguen siendo moneda corriente en Zimbabwe.
El Sr. Chamisa ha estado en la política de oposición durante más de dos décadas.
Durante este tiempo, dice que ha enfrentado amenazas a su vida, incluido escapar de un presunto intento de asesinato en 2022 cuando su convoy fue atacado durante las campañas de elecciones parciales. También sufrió una fractura en el cráneo durante un ataque contra la oposición en 2007.
Anteriormente fue el líder de otro partido, el MDC, del que se marchó tras una lucha de poder antes de fundar el CCC en 2022.