NUEVA DELHI (AP) — La elección más grande del mundo también podría ser una de las más consecuentes.
India tiene cerca de 970 millones de votantes entre sus más de 1.4 millones de habitantes, y su elección general enfrenta al primer ministro Narendra Modi, un nacionalista hindú declarado, contra una amplia alianza de partidos de oposición que están luchando por ponerse al día.
Ahora de 73 años, Modi llegó al poder por primera vez en 2014 con promesas de desarrollo económico, presentándose como un forastero que luchaba contra la corrupción. Desde entonces, ha fusionado la religión con la política en una fórmula que ha atraído un amplio apoyo de la mayoría hindú del país.
India bajo Modi es una potencia global en ascenso, pero su gobierno también se ha visto marcado por el aumento del desempleo, ataques de nacionalistas hindúes contra minorías, particularmente musulmanes, y un espacio cada vez más reducido para la disidencia y los medios de comunicación libres.
¿CÓMO FUNCIONA LA ELECCIÓN?
El último día de votación en esta elección de 6 semanas fue el sábado. El conteo de votos comenzará el martes y se actualizará a lo largo del día. Es probable que los resultados de la elección se conozcan el mismo día.
Los votantes eligen a 543 miembros para la cámara baja del Parlamento para un mandato de cinco años.
Se emitieron votos en más de un millón de centros de votación. Cada una de las siete fases de votación duró un día con varios distritos electorales en múltiples estados votando ese día. La votación escalonada permitió al gobierno transportar a los funcionarios electorales y a las máquinas de votación y desplegar decenas de miles de tropas para prevenir la violencia. Los candidatos recorrieron el país, los trabajadores electorales caminaron a aldeas remotas y los votantes hicieron fila durante horas en un calor sofocante.
India tiene un sistema electoral multipartidista de mayoría simple en el que el candidato que recibe la mayoría de los votos gana. Para obtener una mayoría, un partido o coalición debe superar el umbral de 272 escaños.
India utiliza máquinas de votación electrónica.
¿QUIÉNES SON LOS CANDIDATOS?
El Partido Bharatiya Janata de Modi y su principal rival, Rahul Gandhi del Congreso Nacional Indio, representan a las dos facciones más grandes del Parlamento. Varios otros partidos regionales importantes forman parte de un bloque de oposición.
Los partidos de oposición, que antes estaban fragmentados, se han unido bajo un frente llamado INDIA, o Alianza de Desarrollo Nacional Inclusivo de India, para negarle a Modi una tercera victoria consecutiva en las elecciones.
La alianza ha presentado un solo candidato principal en la mayoría de los distritos electorales. Pero ha sido sacudida por diferencias ideológicas y conflictos de personalidad, y aún no ha decidido su candidato a primer ministro.
La mayoría de las encuestas a pie de urna proyectan que Modi está listo para extender su década en el poder con un tercer mandato consecutivo, especialmente después de que abrió un templo hindú en la ciudad norteña de Ayodhya en enero, cumpliendo así la promesa de su partido de nacionalismo hindú. Durante las elecciones, Modi intensificó la retórica polarizadora en discursos incendiarios que apuntaban a la minoría musulmana del país.
Otra victoria consolidaría a Modi como uno de los líderes más populares e importantes del país. Seguiría a una victoria aplastante en 2019, cuando el BJP obtuvo una mayoría absoluta al barrer 303 escaños parlamentarios. El partido del Congreso logró solo 52 escaños.
¿CUÁLES SON LOS GRANDES TEMAS?
Durante décadas, India se ha aferrado tenazmente a sus convicciones democráticas, en gran parte debido a elecciones libres, una judicatura independiente, una prensa próspera, una oposición fuerte y una transición pacífica del poder. Algunas de estas credenciales se han erosionado bajo el gobierno de 10 años de Modi, y las elecciones se ven como una prueba de los valores democráticos del país.
Muchos observadores ahora han clasificado a India como un “régimen híbrido” que no es ni una democracia completa ni una autocracia completa.
Los resultados de las elecciones también pondrán a prueba los límites de Modi. Sus críticos lo acusan de basar su campaña en una plataforma hinduista, poniendo en peligro las raíces seculares del país.
Bajo Modi, los medios de comunicación, antes considerados vibrantes y en gran medida independientes, se han vuelto más complacientes y las voces críticas han sido silenciadas. Los tribunales se han plegado en gran medida a la voluntad de Modi y han emitido fallos favorables en casos cruciales. La centralización del poder ejecutivo ha tensado el federalismo de India. Y las agencias federales han abrumado a los principales líderes de la oposición con casos de corrupción, que estos niegan.
Otro tema clave es la gran economía de India, que es una de las que más crecen en el mundo. Ha ayudado a India a surgir como una potencia global y un contrapeso a China. Pero a pesar del crecimiento de India en algunos indicadores, el gobierno de Modi ha tenido problemas para generar suficientes empleos para los jóvenes indios, y en su lugar ha dependido de programas de bienestar como alimentos gratuitos y viviendas para atraer votantes.