El Ministerio de Relaciones Exteriores de Qatar, que ha liderado las conversaciones de alto el fuego, dijo en un comunicado que las negociaciones continuaban incluso en medio de los enfrentamientos. La reanudación de los ataques aéreos “complica los esfuerzos de mediación y agrava la catástrofe humanitaria en la franja”, dijo el ministerio.
Bajo el alto el fuego que entró en vigor el pasado viernes, más de 100 rehenes israelíes y de doble nacionalidad, en su mayoría israelíes secuestrados en los ataques liderados por Hamas, fueron liberados de Gaza a cambio de la liberación de 240 prisioneros y detenidos palestinos en cárceles israelíes. En ambos lados, el intercambio se centró en mujeres y niños. Funcionarios de Israel y Hamas dijeron que el grupo armado tenía pocos rehenes restantes en esas categorías.
El viernes temprano, poco antes de que el alto el fuego llegara a su fin, el ejército de Israel dijo en el sitio de redes sociales X que había interceptado un proyectil disparado desde Gaza. Los sistemas automatizados de alerta de cohetes informaron que las sirenas de alerta de bombardeo sonaron en varias áreas del sur de Israel, lo que indica que se habían disparado cohetes o proyectiles desde el territorio.
Luego, justo después de que pasara el plazo de las 7 de la mañana, tanto el ejército israelí como el Ministerio del Interior de Gaza informaron que Israel estaba llevando a cabo ataques en toda Gaza. Las sirenas de alerta de bombardeo sonaron en varias partes del sur de Israel, lo que indica que Hamas u otros grupos armados aliados en Gaza habían disparado hacia Israel.
Los funcionarios de salud de Gaza comenzaron rápidamente a informar de heridos. Para mediodía, al menos 32 personas habían muerto en Gaza desde la reanudación de los enfrentamientos, según Ashraf al-Qidra, el portavoz del Ministerio de Salud de Gaza.
La pausa en los enfrentamientos había dado un breve respiro a los 2,2 millones de personas en Gaza de los devastadores ataques israelíes. Desde el 7 de octubre, cuando Hamas lideró ataques terroristas contra Israel que, según el gobierno israelí, mataron a aproximadamente 1.200 personas y resultaron en alrededor de 240 rehenes, Israel ha librado una campaña militar devastadora que, según las autoridades sanitarias de Gaza, ha matado a más de 13.000 personas.
La mayoría de la población de Gaza ha sido desplazada y sufre una escasez aguda de alimentos, agua, medicinas y combustible en medio de una destrucción generalizada. La pausa de una semana permitió que más ayuda llegara al enclave devastado a través de la frontera egipcia que el goteo que había llegado antes del alto el fuego. Wael Abu Omar, portavoz del lado gazatí del cruce fronterizo, dijo que el viernes no entraron camiones de ayuda en Gaza.
“Lamento profundamente que las operaciones militares hayan vuelto a comenzar en Gaza”, dijo el secretario general de la ONU, António Guterres, en un comunicado. “El regreso a las hostilidades solo muestra lo importante que es tener un verdadero alto el fuego humanitario”, agregó.
Aaron Boxerman, Iyad Abuheweila, Hwaida Saad y Johnatan Reiss contribuyeron a este informe.