PARIS (AP) — El número de incidentes violentos reportados en el territorio francés del Pacífico de Nueva Caledonia descendió levemente el viernes, un día después de que Francia impusiera un estado de emergencia al desplegar 1,000 refuerzos prometidos para los servicios de seguridad con poderes aumentados para sofocar la agitación en el archipiélago que desde hace mucho tiempo ha buscado la independencia.
El principal funcionario francés en el territorio, el Alto Comisionado Louis Le Franc, anunció medidas estrictas el viernes bajo el estado de emergencia declarado por el presidente Emmanuel Macron. Debido a severas perturbaciones del orden público, ahora rige un toque de queda de 6 p.m. a 6 a.m.
El toque de queda nocturno se extendió durante la duración del estado de emergencia, que estará vigente durante al menos 11 días. Las fuerzas militares francesas fueron desplegadas para proteger puertos y aeropuertos y liberar a las tropas policiales.
“Excepciones a este toque de queda incluyen al personal de servicios públicos esenciales, viajes médicos urgentes y actividades críticas nocturnas”, dijo Le Franc.
Dijo que las infracciones al toque de queda resultarían en penas de hasta seis meses de prisión y una multa, instando a todos a seguir las regulaciones y ayudar a restaurar el orden.
Ha habido décadas de tensiones en el archipiélago entre los kanaks indígenas que buscan la independencia y los descendientes de colonizadores que desean seguir siendo parte de Francia.
Los enfrentamientos estallaron el lunes tras las protestas por las reformas electorales que se aprobaron en la Asamblea Nacional en París. Los legisladores aprobaron cambios en la constitución francesapromovidos por el gobierno del presidente Emmanuel Macron, que permitirían a los residentes que han vivido en Nueva Caledonia durante 10 años votar en elecciones provinciales.
Thierry de Greslan, un representante del hospital en Numea, la capital del territorio, manifestó su preocupación por la situación que se estaba deteriorando, empeorada por los bloqueos de carreteras en la ciudad.
De Greslan, presidente de la comisión médica del Centro Hospitalario Territorial de Numea, dijo: “Estimamos que tres o cuatro personas puedan haber fallecido debido a la falta de acceso a la atención médica”, agregando que alrededor de 50 pacientes de diálisis no habían podido recibir sus tratamientos. “Estamos teniendo grandes dificultades para trasladar a nuestros pacientes y trabajadores de la salud. Los equipos han estado trabajando desde el lunes y están exhaustos.”
El número de visitas a salas de emergencia disminuyó significativamente, con una reducción del 50% reciente y una disminución del 80% el jueves. “Estamos en una situación de guerrilla urbana con heridas de bala todas las noches”, dijo de Greslan.
Los quirófanos del hospital están funcionando las 24 horas del día y, si bien el personal está preparado para crisis inmediatas, de Greslan expresó preocupación por el futuro. “Estamos listos para enfrentar esto, pero me preocupa el efecto de ‘rebote’ en los pacientes que actualmente no están recibiendo atención y que están extremadamente estresados”, señaló.
Las autoridades francesas en Nueva Caledonia y el Ministerio del Interior en París dijeron que cinco personas, incluidos dos policías, murieron después de las protestas a principios de esta semana.
Al menos 60 miembros de las fuerzas de seguridad resultaron heridos y 214 personas fueron arrestadas por enfrentamientos con la policía, incendios provocados y saqueos el jueves, dijo Le Franc.
Dos miembros de la comunidad kanak estuvieron entre las cinco personas asesinadas.
Los líderes de un Sindicato de Trabajadores Kanak en París hicieron un llamado a la calma y dijeron que estaban profundamente entristecidos por las muertes en su lejana tierra natal.