Horas después de que Hamás e Israel completaran el quinto intercambio de rehenes y prisioneros, su frágil tregua continuó hasta el miércoles, lo que permitió la liberación de más personas en ambos lados, a medida que líderes globales pedían una pausa más larga en los combates.
La tregua ha estado ocasionalmente en duda desde que comenzó el viernes pasado, con delicadas negociaciones diarias sobre las listas de personas liberadas en ambos lados. El martes, cada lado acusó al otro de violar el alto el fuego, pero no se retiró del acuerdo, que originalmente pedía que Hamás liberara a 50 rehenes israelíes a cambio de 150 palestinos detenidos por Israel.
El martes, el primer día de una extensión de dos días del alto el fuego, Hamás liberó más rehenes, elevando el total a al menos 85, según un recuento del New York Times. Israel ha liberado a 180 palestinos de sus prisiones.
Diplomáticos y oficiales de inteligencia estaban trabajando para negociar una pausa más larga. El martes, los principales funcionarios de inteligencia de Egipto, Israel y Estados Unidos se reunieron con el primer ministro de Qatar, el principal mediador entre Hamás e Israel. Dos personas con conocimiento de las conversaciones dijeron que la esperanza era que el modelo actual generara un impulso que evitara la reanudación de hostilidades y creara las condiciones para conversaciones a más largo plazo.
Israel ha dicho que Hamás y otros grupos militantes mataron a unas 1.200 personas el 7 de octubre y secuestraron a unas 240 civiles, tanto adultos como niños, y soldados. Israel ha respondido con ataques aéreos y terrestres que han matado a más de 13.000 personas, posiblemente miles más, según las autoridades de salud de Gaza.
Durante semanas, Estados Unidos y sus aliados han estado preocupados de que Irán, el principal partidario de Hamás, inste a las milicias regionales que apoya en Líbano, Irak y Siria a unirse a la guerra. El éxito del alto el fuego ha enfriado temporalmente esas preocupaciones, y el Grupo de los Siete, las naciones más ricas del mundo, ha aumentado la presión sobre Israel para proteger a los civiles y aumentar la ayuda, al tiempo que exige que Hamás libere más rehenes.
Pero hay preguntas sobre cuánto tiempo puede durar la tregua. No está claro si Hamás tiene acceso a todos los rehenes o si siquiera sabe dónde están los restantes, dijo el portavoz de la Casa Blanca, John Kirby, el martes. Y a pesar de la pausa en los combates, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha dicho que destruir a Hamás sigue siendo el objetivo final de su nación en la guerra.