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El presidente electo Donald Trump y su equipo consultaron con Trae Stephens, presidente ejecutivo de la startup de tecnología de defensa Anduril Industries Inc., subrayando los planes de la próxima administración de sacudir las fuerzas armadas de EE. UU., según personas familiarizadas con el tema.
Trump y otros miembros de su círculo interno se reunieron el jueves con Stephens para discutir formas de transformar la defensa nacional, dijeron las personas, que solicitaron anonimato para discutir una conversación privada. Stephens, también socio de la firma de capital de riesgo de Peter Thiel, Founders Fund, trabajó anteriormente en apoyo a la inteligencia de EE. UU. y en el Capitolio.
Varios prominentes capitalistas de riesgo de Silicon Valley apoyaron a Trump y su compañero de fórmula, el senador de EE. UU. JD Vance, quien invirtió en la primera ronda de financiamiento de Anduril mientras estaba en la firma de Steve Case, Revolution. Elon Musk ha surgido como el aliado más firme de Trump, gastando más de $100 millones en el esfuerzo electoral y prestándole credibilidad a la campaña entre muchos dentro de la industria tecnológica.
Los portavoces de Anduril no hicieron comentarios de inmediato, mientras que la transición de Trump no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Trump ha prometido renovar el establecimiento de defensa de EE. UU., reduciendo el desperdicio y modernizando la manera en que se fabrican y se adquieren armas. Anduril, valorada en $14 mil millones en su última ronda de financiamiento, fabrica vehículos submarinos, herramientas de vigilancia y sistemas de armas autónomas, y se ve a sí misma como una alternativa a los contratistas militares más establecidos.
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Esos cambios ya están en marcha con una serie de selecciones iconoclásticas para puestos clave en seguridad nacional. Esta semana, Trump nombró a la exdemócrata Tulsi Gabbard como directora de inteligencia nacional, al presentador de Fox News Pete Hegseth como secretario de defensa y al ferviente partidario, el representante Matt Gaetz como fiscal general. Los tres necesitarán ser confirmados por el Senado de EE. UU.
El acercamiento a Stephens también destaca la influencia continua de Thiel, quien apoyó a Trump en 2016 y ayudó a colocar a varios de sus discípulos y aliados en papeles clave durante la primera administración.
Michael Kratsios, anteriormente principal en la firma de inversión privada de Thiel, Thiel Capital, se desempeñó como Director de Tecnología de EE. UU. antes de unirse a Scale AI, respaldada por Thiel, en 2021. Se unió al equipo de transición del presidente electo a principios de esta semana para manejar la política tecnológica, según Politico. El colega de toda la vida de Thiel, Ken Howery, también se desempeñó como embajador en Suecia en el primer mandato de Trump.
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Anduril fue cofundada por Stephens y Palmer Luckey, uno de los creadores del auricular de realidad virtual Oculus y ferviente seguidor de Trump. La compañía ha florecido como un importante contratista del gobierno de EE. UU. mientras compite con gigantes tradicionales de defensa por una parte más grande del negocio de seguridad nacional.
Stephens comenzó su carrera hace dos décadas trabajando en el Capitolio y en la oficina de asuntos políticos en la Embajada de Afganistán en Washington. Se graduó de la Facultad de Servicio Exterior de la Universidad de Georgetown, según el sitio web de Anduril.
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