Por Aidan Lewis
(Reuters) – El flujo de ayuda que entra a Gaza desde Egipto ha disminuido casi por completo en las últimas dos semanas, y un colapso en la seguridad ha hecho que sea cada vez más difícil distribuir los alimentos que llegan, según datos y funcionarios de la ONU.
Las cifras diarias muestran una caída precipitosa en los suministros de ayuda desde el 9 de febrero llegando a Gaza, donde la población mayormente desplazada de 2.3 millones enfrenta niveles críticos de hambre.
Antes del conflicto, Gaza dependía de 500 camiones con suministros que ingresaban diariamente, e incluso durante los intensos combates en enero alrededor de 200 camiones de ayuda lograban pasar la mayoría de los días.
Pero según las cifras de la ONU, del 9 al 20 de febrero, el promedio diario cayó a solo 57 camiones. En siete de esos 12 días, llegaron 20 o menos camiones, incluidos solo cuatro camiones el 17 de febrero.
Los envíos a través del cruce de Rafah entre Egipto y Gaza casi se han detenido por completo. Aunque más camiones ocasionalmente han llegado a través del cruce de Kerem Shalom de Israel, han sido interrumpidos con frecuencia por manifestantes israelíes que buscan bloquear las entregas. El cruce estuvo cerrado del 8 al 10 de febrero y del 15 al 17 de febrero.
Israel, que revisa todos los camiones que entran a Gaza desde ambos cruces, culpa a las Naciones Unidas por la disminución en las entregas, y dice que está preparado para acelerar el despacho de ayuda.
“Estamos listos y dispuestos a facilitar la entrada de decenas, si no cientos de camiones todos los días”, dijo el coronel Moshe Tetro, Jefe de la Administración de Coordinación y Enlace de Israel para Gaza, en una conferencia de prensa. “El cuello de botella no está en el lado israelí”.
Dijo que 450 camiones estaban esperando en el lado palestino del cruce de Kerem Shalom con suministros de ayuda para grupos internacionales que distribuyen en Gaza.
“Si hubiera un trabajo suficiente y eficiente por parte de la comunidad internacional que está trabajando dentro de Gaza, creo que la distribución sería mucho mejor”.
Las Naciones Unidas dicen que se está volviendo más difícil distribuir ayuda dentro de Gaza debido al colapso de la seguridad en el territorio, donde la mayoría de los residentes ahora están atrapados en campamentos improvisados. Las tropas de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) ahora ocupan la mayor parte de Gaza y son responsables del paso seguro para los convoyes de ayuda a través de las áreas que controlan.
“Las IDF tienen la responsabilidad de facilitar las operaciones humanitarias dentro de Gaza. La ayuda acumulada en el cruce es evidencia de la ausencia de este entorno facilitador en medio de enormes necesidades”, dijo Eri Kaneko, portavoz de la oficina de asuntos humanitarios de la ONU.
“Las Naciones Unidas y nuestros socios humanitarios no han podido recoger regularmente suministros de los puntos de cruce debido a preocupaciones de seguridad y la falta de cumplimiento de la ley”, dijo. “A pesar de esto, nuestros colegas han estado asumiendo riesgos significativos para mantener la entrega de suministros humanitarios esenciales para la supervivencia de los civiles”.
La policía palestina dejó de brindar escoltas para los convoyes de ayuda después de que al menos ocho policías murieran en ataques israelíes, dijo Juliette Touma, Directora de Comunicaciones de UNRWA.
Dentro de Gaza, los residentes desesperados han detenido convoyes para apoderarse de la ayuda de los camiones.
“En la mayoría de los casos, cuando la comida se toma directamente de los convoyes, es debido a la desesperación absoluta, con personas que incluso la comen en el acto”, dijo Jonathan Fowler, un portavoz de UNRWA.
El martes, el Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas dijo que estaba pausando entregas limitadas al norte de Gaza, solo dos días después de que se reanudaran, después de que sus convoyes se enfrentaron a multitudes que intentaban subir a los camiones, tiroteos en la Ciudad de Gaza, la incautación de harina y la golpiza de un conductor de camión.
UNRWA dice que la última vez que pudo entregar ayuda al norte de la Franja de Gaza fue el 23 de enero.