Durante la noche, cuatro personas murieron cuando una aeronave israelí atacó un campamento de carpas para personas desplazadas al lado del hospital de Mártires de Al-Aqsa en la ciudad central de Deir al-Balah.
El ejército israelí dijo que había realizado “un ataque preciso contra terroristas que estaban operando dentro de un centro de comando y control en el área de un estacionamiento”, y que tomó medidas para mitigar el daño a civiles.
“Poco después del ataque, se encendió un incendio en el estacionamiento del hospital, probablemente debido a explosiones secundarias. El incidente está bajo revisión”, escribió el teniente coronel Shoshani en X. “El hospital y su funcionalidad no se vieron afectados por el ataque”.
Un video publicado en línea parecía mostrar explosiones secundarias externas, pero no estaba claro si fueron causadas por armas o tanques de combustible.
Un portavoz del hospital Al-Aqsa, el Dr. Khalil al-Daqran, dijo que más de 50 carpas se quemaron y que estaba luchando por tratar a unas 50 personas heridas, incluidos niños, mujeres y ancianos, así como víctimas de otros recientes ataques israelíes.
Una residente del campamento, Umm Mahmoud Wadi, dijo que su familia lo perdió todo.
“¿A dónde llevo a mis hijas? Se acerca el invierno. No hay ropa de cama, no hay ropa, nada. Estoy devastada. La bombona de gas explotó – y nosotros [nuestro mundo] explotó”.
El domingo por la noche, más de 20 personas murieron presuntamente por disparos de tanques en una escuela de la ONU que se estaba utilizando como refugio para familias desplazadas en el campamento de refugiados de Nuseirat, al norte de Deir al-Balah.
Una portavoz de la UNRWA dijo a la BBC que había sido “otra noche de horror absoluto para la gente en la Franja de Gaza”.
Louise Wateridge dijo que los graves daños en la escuela Al-Mufti en Nuseirat significaban que no se podía utilizar para la segunda ronda de la importante campaña de vacunación contra la polio en Gaza, que comenzó en el centro del territorio el lunes.
Los médicos locales y los trabajadores de la UNRWA están liderando el esfuerzo para administrar gotas de la vacuna a 590,000 niños menores de 10 años durante las próximas dos semanas.
La campaña fue organizada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef después de que se descubriera el primer caso de polio en dos décadas en un bebé no vacunado en Gaza central, donde ahora el 80% de los 2.3 millones de habitantes de Gaza se están refugiando.
Los funcionarios de la ONU están presionando para que se respeten pausas humanitarias durante la campaña de vacunación.
“Esto es crítico porque no podemos administrar vacunas a niños que están huyendo por sus vidas, que están desplazados por la fuerza. No podemos administrar vacunas mientras caen bombas del cielo”, dijo la Sra. Wateridge.
Añadió: “Estas pausas son durante el día, hay marcos temporales muy específicos para llegar a estos miles de niños. Los ataques y las operaciones militares continúan alrededor de eso y es una experiencia increíblemente peligrosa y aterradora llevar a cabo cualquier tipo de respuesta humanitaria en estas condiciones”.
Israel lanzó una campaña para destruir a Hamas en respuesta al ataque sin precedentes del grupo en el sur de Israel el 7 de octubre de 2023, en el que murieron unas 1,200 personas y 251 fueron tomadas como rehenes.
Más de 42,280 personas han muerto en Gaza desde entonces, según el ministerio de salud dirigido por Hamas en el territorio.