Bobby Kotick, CEO de Activision Blizzard hablando en la Conferencia Anual de Allen&Co en Sun Valley, Idaho.
David A. Grogan | CNBC
Un grupo de aproximadamente 600 probadores de software en Activision formaron el sindicato más grande de la industria de videojuegos de EE. UU. hasta la fecha.
El sindicato es el primero en organizarse bajo un nuevo acuerdo laboral negociado como parte de la adquisición de Microsoft por $69 mil millones de Activision en octubre, la adquisición más grande de la compañía hasta ahora.
El acuerdo requería que Microsoft se mantuviera neutral en cuanto a los empleados que expresaban interés en sindicalizarse y proporcionar líneas de comunicación e información adecuadas para que esos trabajadores decidieran. Ese acuerdo de neutralidad laboral entró en vigor después de que se cerrara el acuerdo entre Microsoft y Activision en octubre tras meses de resistencia regulatoria.
“Mantuvimos nuestro compromiso de permanecer neutrales durante la campaña de organización, y después de esta votación”, dijo la abogada de Microsoft, Amy Pannoni, en un comunicado.
En enero, Microsoft despidió a 1,900 trabajadores en su división de juegos.
Activision Quality Assurance United-CWA, el nombre del sindicato, está buscando salarios más altos y más oportunidades laborales, dijo la probadora de QA Kara Fannon en un comunicado.
Los empleados, que trabajan en la división de aseguramiento de calidad de Activision en California, Texas y Minnesota, se unieron a los Communications Workers of America para formar su alianza histórica.
“Microsoft sigue cumpliendo su compromiso de permitir que los trabajadores decidan por sí mismos si desean un sindicato”, dijo el presidente de la CWA, Claude Cummings Jr., en un comunicado.
La organización laboral en la industria tecnológica ha proliferado a lo largo de los años a medida que las grandes empresas de tecnología han crecido y han sido más examinadas en cuanto a protecciones laborales.
Los trabajadores de QA en Activision, que revisan juegos en busca de fallas y errores, han enfatizado especialmente la necesidad de protecciones laborales, al notar que sus roles se sienten menos valorados en comparación con los ingenieros de software o desarrolladores.
Antes de que se cerrara el acuerdo entre Microsoft y Activision, los trabajadores de QA en la sucursal de Albany del desarrollador de videojuegos también habían formado un sindicato.
“QA es actualmente una disciplina subvalorada en las industrias de juegos y software”, escribió Albany en redes sociales en ese momento. “Nos esforzamos por fomentar entornos laborales donde se nos respete y compense por nuestro papel esencial en el proceso de desarrollo.”