Los ingenieros de un equipo de búsqueda de fugas de Thames Water descargan equipos de su furgoneta durante un turno de noche en Londres, Reino Unido, el miércoles 2 de mayo de 2023. El director ejecutivo del mayor proveedor de agua de Gran Bretaña renunció con efecto inmediato el martes.
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LONDRES — Los reguladores británicos tomaron el jueves la medida sin precedentes de colocar la empresa de servicios públicos de agua para Londres y partes del sur de Inglaterra en medidas especiales, mientras la compañía busca financiación de nuevos inversores para asegurar su futuro.
El regulador Ofwat dijo que Thames Water estará bajo un escrutinio más intenso y debe reevaluar sus planes para mejorar el desempeño operativo, la entrega y la resistencia financiera. Ofwat aprobó £16.9 mil millones ($21.8 mil millones) en gastos para que la compañía invierta en la mejora de servicios para los clientes y el medio ambiente —una suma por debajo de los £19.8 mil millones que Thames Water había solicitado.
El regulador, por otro lado, dio permiso a la compañía de aumentar las facturas a los clientes en un promedio de £99 anuales durante los próximos cinco años, casi la mitad de lo que había solicitado.
En un comunicado el jueves, Thames Water dijo que su propuesta de gastos estaba destinada a “mantener suministros confiables de agua potable segura y de alta calidad y llevarse y tratar eficazmente las aguas residuales en Londres, el Valle del Támesis y el Home Counties, tanto ahora como en el futuro.”
La compañía cuestionó la declaración de Ofwat de que su plan de negocio era “inadecuado,” pero dijo que proporcionará al regulador más evidencia para respaldar sus propuestas y señaló que la determinación final no está prevista hasta diciembre de 2024.
La compañía, en crisis, cuenta con más de 16 millones de clientes y busca evitar resultados como la nacionalización temporal o la fragmentación. En la primavera de este año, los accionistas rechazaron su oferta de una inyección de capital de £500 millones, mientras que su empresa matriz Kemble entró en suspensión de pagos.
Thames Water es propiedad de un consorcio de accionistas institucionales que incluyen fondos de pensión, fondos soberanos y capital privado. Su mayor accionista externo es el Ontario Municipal Employees Retirement System, uno de los mayores planes de pensiones de Canadá.
Las deudas de la empresa se dispararon en las últimas dos décadas, y el miércoles reportó una deuda neta de £15.2 mil millones en el año hasta marzo de 2024. Dijo que, bajo su escenario base actual, no se quedaría sin dinero hasta fines de mayo de 2025, asumiendo que puede seguir utilizando sus facilidades de crédito rotativo y todos sus recursos financieros.
Thames Water —y otras empresas de servicios públicos británicas— han sido fuertemente criticadas por el aumento brusco de vertidos de aguas residuales en las vías fluviales de Gran Bretaña, incluido el río Támesis.
El presidente de Thames Water, Adrian Montague, dijo el miércoles que el plan de la compañía atraería “una inversión muy necesaria,” y añadió que creía posible “darle la vuelta a este negocio.”
En los resultados de la compañía, Montague dijo que la industria del agua en el Reino Unido requerirá una inversión mucho mayor en los próximos años y estará compitiendo por deuda y capital en un “mercado muy competitivo, en un momento de mayor incertidumbre y riesgo regulatorio y político.”
S&P Global el miércoles asestó un nuevo golpe a la compañía, al poner su deuda de clase A y clase B en riesgo de una rebaja, lo que refleja la creencia de que Thames Water podría no poder mantener una liquidez adecuada —generando temores en el mercado sobre una calificación de “basura.”
La posición de la compañía está bajo una presión adicional debido al importante programa de inversión de capital requerido, dijo S&P, lo que compensará el flujo de efectivo operativo libre y limitará su capacidad para desapalancarse.
Corrección: El titular de este artículo se ha actualizado para reflejar con precisión el total de la deuda de Thames Water convertida a dólares estadounidenses.