Mientras Canada se prepara para que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, imponga aranceles elevados a los bienes canadienses, el Ministro de Vivienda, Nathaniel Erskine-Smith, dice que el costo de la construcción de viviendas va a subir, a pesar de la necesidad urgente de más viviendas.
“Estoy consciente de la preocupación. El gobierno está consciente de la preocupación. La lista de medidas retaliatorias está consciente de esa preocupación”, dijo Erskine-Smith en una entrevista en CBC’s The House.
Canadá se enfrenta a una posible guerra comercial con Estados Unidos, que podría comenzar a principios del próximo mes. Un arancel del 25 por ciento sobre la mayoría de los bienes canadienses y mexicanos fue pausado hasta el 4 de marzo.
El gobierno federal ha prometido imponer aranceles de represalia si Trump cumple con sus amenazas. En febrero, publicó una lista de bienes estadounidenses que atacaría en un contraataque, incluyendo electrodomésticos de cocina y baño y materiales de construcción de plástico.
Erskine-Smith le dijo a la presentadora Catherine Cullen que el mayor desafío de Canadá es combatir los aranceles de Trump. El siguiente desafío más grande, en su opinión, es construir la mayor cantidad de viviendas posible.
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La inminente guerra comercial de EE. UU. crea incertidumbre en el mercado inmobiliario de B.C.
Una inminente guerra comercial con Estados Unidos ha provocado incertidumbre en el mercado inmobiliario de B.C. Los líderes de la industria dicen que los costos de construcción para nuevos desarrollos ya están por las nubes y que los aranceles de represalia sobre materiales importados de EE. UU. los aumentarían aún más. Jon Hernandez de CBC explica cómo todo esto podría retrasar futuros proyectos de viviendas.
“Estos desafíos están en conflicto entre sí, porque a medida que vemos una mayor incertidumbre debido a los aranceles, a medida que vemos aumentos de costos en ciertos materiales, los precios de construcción de viviendas van a subir. Y necesitamos que suceda exactamente lo contrario”, dijo.
En un comunicado de principios de este mes condenando los aranceles de Trump, la Asociación Canadiense de Constructores de Viviendas (CHBA) dijo que los aranceles de represalia sobre productos y materiales de construcción “serían perjudiciales para una industria que ya está luchando en muchas partes de Canadá”.
‘Una nube bastante grande’: Desarrollador
Brad Carr, CEO del gigante de la construcción de viviendas Mattamy Homes Canada, dijo que teme el impacto de los aranceles en la economía canadiense en general. Añadió que la incertidumbre en torno a la inminente guerra comercial “está creando una nube bastante grande sobre el espacio de la vivienda en este momento”.
Si el costo de construir viviendas aumenta, impulsado por precios más altos de artículos importados de EE. UU. como electrodomésticos o accesorios de plomería, Carr dijo que su empresa “tendría que trasladar esos costos al comprador”.
“Tenemos muchos interesados a los que debemos atender, inversionistas, banqueros… Así que esos costos no pueden ser absorbidos, especialmente en un momento en el que la vivienda ya está bajo mucha presión”, agregó.
Carr dijo que su empresa intentaría encontrar nuevos proveedores y buscar otras formas “de mantener los costos lo más bajos posible”.
Brad Carr, el CEO del gigante de la construcción de viviendas Mattamy Homes Canada, dice que su empresa tendría que trasladar los costos a los consumidores si los aranceles de Trump elevan el precio de los materiales, pero también buscaría otros proveedores para mantener los costos lo más bajos posible. (Benjamin Lopez Steven/CBC)
La CHBA dijo que los importadores canadienses en la cadena de suministro residencial necesitarían buscar alternativas a los productos estadounidenses después de que Canadá imponga sus aranceles de represalia.
“Esto llevará tiempo y es probable que los productos sigan siendo más caros que los bienes estadounidenses antes de los aranceles, aunque pueden ser menos del aumento del 25 por ciento”, dijo la CHBA en su comunicado.
Carr dijo que Canadá está en “un momento de incertidumbre real” con “mucho por resolver y esperemos que mucho por resolver antes de que realmente suceda.
“La primera ayuda que pediría es resolver la guerra comercial”, dijo Carr. “Pero eso probablemente sea mucho pedir”.