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La economía del Reino Unido creció inesperadamente un 0,1 por ciento en el cuarto trimestre, en un impulso sorpresa para el Partido Laborista mientras busca cumplir sus promesas de reactivar la economía.
La cifra de PIB para los últimos tres meses del año, según la Oficina de Estadísticas Nacionales, se comparó con un crecimiento nulo en el trimestre que terminó en septiembre.
Los economistas habían pronosticado una contracción del 0,1 por ciento en el cuarto trimestre, según una encuesta de Reuters.
La canciller Rachel Reeves ha prometido hacer del crecimiento la principal misión del gobierno, apoyando proyectos como una tercera pista en el aeropuerto de Heathrow en Londres y enlaces de transporte entre Oxford y Cambridge.
Pero la economía ha decepcionado repetidamente desde que el Partido Laborista llegó al poder, estancándose en la segunda mitad del año pasado.
Se espera que la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria reduzca sus previsiones de crecimiento en la próxima Declaración de Primavera, afectando a los ingresos fiscales y sumándose a las presiones fiscales que enfrenta la canciller.
El organismo de control fiscal le dijo a Reeves la semana pasada que el margen de maniobra que tenía anteriormente frente a su regla presupuestaria clave se había esfumado debido a factores como los pobres datos económicos.
Esta es una historia en desarrollo