El equipo de campaña de Donald Trump ha pedido una investigación sobre “intervención extranjera flagrante” en las elecciones por parte del Partido Laborista.
La queja a la comisión electoral federal de EE. UU. dijo que hubo “interferencia” en forma de “aparentes contribuciones ilegales de extranjeros hechas por el Partido Laborista del Reino Unido” que fueron “aceptadas” por la campaña de Kamala Harris.
Hace referencia a un informe del Washington Post que sugirió que “estrategas vinculados al Partido Laborista de Gran Bretaña han estado ofreciendo consejos a Kamala Harris sobre cómo recuperar a los votantes desafectos y dirigir una campaña ganadora desde el centro izquierda”.
También menciona un informe del Telegraph que sugirió que Morgan McSweeney, jefe de personal de Sir Keir Starmer, y Matthew Doyle, su director de comunicaciones, “asistieron a una convención en Chicago y se reunieron con el equipo de campaña de la Sra. Harris”.
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La queja, presentada en nombre de Donald J Trump for President 2024, agrega que a los extranjeros se les prohíbe “directa o indirectamente” hacer “una contribución o donación de dinero u otra cosa de valor, o hacer una promesa expresa o implícita de hacer una contribución o donación”, en apoyo de un candidato estadounidense.
Susie Wiles, la co-directora de campaña de Trump-Vance, dijo: “La aceptación y uso de esta asistencia extranjera ilegal por parte de la campaña de Harris es simplemente otro intento débil en una larga lista de interferencias electorales no estadounidenses”.
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