El primer ministro polaco Donald Tusk declaró en una entrevista con TVN24 el 12 de enero que no habrá lugar para posiciones basadas en “sentimientos anti-ucranianos” en el gobierno polaco, como fue el caso con el anterior partido gobernante Ley y Justicia (PiS).
Durante el período previo a las elecciones polacas en octubre, las tensiones entre Polonia y Ucrania aumentaron, con algunos acusando al PiS de fomentar retórica anti-ucraniana como estrategia electoral. Tusk reiteró regularmente su apoyo a Ucrania durante la campaña, una postura que ha mantenido desde que se convirtió en primer ministro.
“No puede haber dudas sobre la guerra y nuestro compromiso, y el de todo el mundo occidental, con Ucrania en su enfrentamiento con Rusia. Todo patriota polaco debe reconocer absolutamente estas razones”, dijo Tusk.
“La situación en Ucrania y en el frente es absolutamente el tema número uno para la seguridad polaca”, agregó.
Tusk dijo que planeaba visitar Kyiv en los próximos días e intentaría resolver la protesta y bloqueo fronterizo organizado por camioneros polacos.
Se comprometió a trabajar con el lado ucraniano para poner fin a la crisis.
Los camioneros polacos han estado bloqueando tres cruces con Ucrania desde noviembre de 2023 en protesta por la liberalización de las normas de tránsito de la UE para los camioneros ucranianos, lo que ha causado largas filas en la frontera e impactado negativamente la economía de Ucrania.
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