(Bloomberg) – Kim Jong Un se espera que presida una importante reunión de establecimiento de políticas con un poder renovado, debido a los avances militares y económicos de Corea del Norte que le permitirían rechazar la presión de Estados Unidos para reducir sus programas de armas nucleares.
El Partido del Trabajo de Corea de Kim celebrará una sesión plenaria de su Comité Central antes de fin de año, donde establecerá un rumbo para 2024, informaron los medios estatales. Aunque no se han dado fechas, en los últimos años el evento ha tenido lugar durante varios días en la última semana del calendario.
Kim está en la cúspide de su poder desde que asumió el cargo hace casi una docena de años, con transferencias de armas a Rusia en los últimos meses que probablemente hayan impulsado su economía golpeada por sanciones. Su programa de armas también ha tenido avances significativos que incluyen la prueba, este mes, de un nuevo misil diseñado para llevar una ojiva al territorio continental de Estados Unidos y la aparente puesta en marcha de un reactor nuclear estancado desde hace mucho tiempo que podría aumentar significativamente la producción de plutonio.
“La nuclearización y el fortalecimiento de la preparación militar de su país seguirán siendo los principales temas para Kim el próximo año”, dijo Soo Kim, ex analista de Corea en la Agencia Central de Inteligencia, quien ahora trabaja en la firma de consultoría en gestión con sede en EE. UU., LMI.
En lugar de intentar alcanzar un acuerdo con la actual administración estadounidense, el líder norcoreano “puede encontrar más constructivo y beneficioso esperar a que termine la elección presidencial en 2024”, dijo Soo Kim.
Mientras tanto, Kim Jong Un tiene un nuevo activo para impulsar aún más sus ambiciones nucleares. El Organismo Internacional de Energía Atómica dijo la semana pasada que Corea del Norte ha puesto en marcha un reactor de agua ligera que ha estado en preparación durante años.
“El reactor de agua ligera, al igual que cualquier reactor nuclear, puede producir plutonio en su combustible irradiado, que puede separarse durante el reprocesamiento, por lo que esto es motivo de preocupación”, dijo Rafael Grossi, director general del organismo de control atómico de las Naciones Unidas, en un comunicado.
Si bien Corea del Norte en los últimos años ha dependido de su programa de enriquecimiento de uranio para proporcionar la mayor parte de su material fisible, el nuevo reactor podría producir entre 10 y 20 kilogramos (22 a 44 libras) de plutonio al año, según estimaciones de expertos. La nación ahora produce alrededor de 6 kgs de plutonio al año en lo que había sido su único reactor nuclear, suficiente para aproximadamente una bomba nuclear, según datos recopilados por el Servicio de Investigación del Congreso.
El plutonio es probablemente más adecuado para las ojivas nucleares miniaturizadas del país que el uranio altamente enriquecido, han dicho los expertos, y es probable que los reactores utilizados para producir el material sean capaces de producir tritio, que Corea del Norte puede usar para construir dispositivos termonucleares con una fuerza explosiva mucho mayor que una bomba nuclear convencional.
Hace doce meses, Kim Jong Un se comprometió a aumentar su arsenal nuclear en el próximo año para contrarrestar lo que llamó actos hostiles de Estados Unidos y Corea del Sur. Esa promesa se produjo en un discurso de política en el que dejó casi sin brecha una posible vuelta a las estancadas conversaciones de desarme.
Su estado llevó a cabo pruebas de misiles que simulaban ataques nucleares, lanzó cinco misiles balísticos intercontinentales y puso su primer satélite espía en órbita en 2023.
Este mes, Kim admitió raramente que Corea del Norte enfrenta una crisis demográfica que podría socavar la economía intensiva en mano de obra, y puede usar la reunión para presentar planes para revertir la tasa de natalidad decreciente.
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