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Un juez federal en Nueva Jersey rechazó el lunes los desafíos legales de Johnson & Johnson y Bristol Myers Squibb a las negociaciones de precios de medicamentos de Medicare de la administración de Biden, dictaminando que el programa es constitucional.
La decisión es otra victoria para la administración de Biden en una amarga batalla legal con varias farmacéuticas sobre las conversaciones de precios. La sentencia también debilita la estrategia de la industria farmacéutica de buscar fallos divididos en tribunales inferiores dispersos por los Estados Unidos, lo que podría llevar el problema a la Corte Suprema.
Las negociaciones de precios de medicamentos de Medicare son una política clave bajo la Ley de Reducción de la Inflación del presidente Joe Biden que tiene como objetivo hacer que los costosos medicamentos sean más asequibles para las personas mayores. De esta manera, podría impactar en las ganancias de los fabricantes de medicamentos. Los precios negociados finales para la primera ronda de medicamentos sujetos a las conversaciones, que incluyen uno de J&J y otro de Bristol Myers, entrarán en vigencia en 2026.
J&J y Bristol Myers Squibb no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios sobre el fallo.
En demandas separadas, las farmacéuticas argumentaron que las negociaciones son una confiscación inconstitucional de sus medicamentos por parte del gobierno y una violación de su derecho a la libertad de expresión. También argumentaron que las conversaciones son una condición inconstitucional para participar en los programas de Medicaid y Medicare.
Pero el juez Zahid Quraishi del Distrito de Nueva Jersey escribió en una opinión de 26 páginas que la participación en las negociaciones de precios y en los mercados de Medicare y Medicaid es voluntaria.
Las negociaciones no requieren que los fabricantes de medicamentos “reserven, mantengan o de alguna otra forma guarden” ninguno de sus medicamentos para el uso del gobierno o de los beneficiarios de Medicare, escribió. Quraishi añadió que las conversaciones no obligan a los fabricantes a transmitir o transportar físicamente medicamentos a un nuevo precio negociado.
“Vender a Medicare puede ser menos rentable que antes de la institución del Programa, pero eso no hace que la decisión de [J&J y Bristol Myers Squibb] de participar sea menos voluntaria”, escribió Quraishi. “Por las razones proporcionadas, el tribunal concluye que el Programa no conlleva una toma física ni una apropiación directa” de medicamentos de las dos farmacéuticas.
J&J, Bristol Myers Squibb, Novo Nordisk y Novartis presentaron sus argumentos orales a Quraishi en Nueva Jersey durante la misma audiencia en marzo.
Ese mismo mes, un juez federal en Delaware rechazó la demanda separada de AstraZeneca contra las negociaciones. Otro juez federal en Texas desestimó una demanda separada contra las conversaciones de precio en febrero.
Un juez federal en Ohio también emitió un fallo en septiembre negando una medida cautelar solicitada por la Cámara de Comercio, uno de los grupos de presión más grandes del país, que buscaba bloquear las negociaciones de precios antes del 1 de octubre.