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Jeremy Hunt, el ex canciller conservador, ha acusado a la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria de vulnerar la imparcialidad política en su manejo de una revisión sobre si se le proporcionó información adecuada antes del último Presupuesto.
El organismo independiente de vigilancia fiscal del Reino Unido planea publicar los resultados de una revisión sobre la “adequación de la información y garantías” sobre el gasto ministerial que el Tesoro proporcionó a la OBR el miércoles, cuando la canciller Rachel Reeves presentará su primer Presupuesto.
Reeves acusó a Hunt de ocultar la presión del gasto al público y al organismo de vigilancia fiscal, lo que dejó las finanzas públicas en un estado mucho peor de lo esperado.
En una carta al presidente de la OBR, Richard Hughes, Hunt dijo que el plan del organismo de publicar sus hallazgos el día del Presupuesto fue “una sorpresa y una preocupación significativa”, añadiendo que sería “imposible defenderlo como cualquier cosa distinta a una intervención política”.
“No creo que la publicación de una revisión con críticas hacia el principal partido de la oposición el día de un Presupuesto sea consistente con la imparcialidad política”, añadió Hunt en la carta fechada el 25 de octubre.
Desde que ganó las elecciones el 4 de julio, el Partido Laborista ha intensificado las críticas sobre el estado de las finanzas públicas, ya que Reeves se prepara para anunciar hasta £40bn de aumentos de impuestos y recortes de gastos en el Presupuesto.
El Tesoro no ha logrado explicar completamente cómo llegó al número de £22bn, negándose a responder a una solicitud de información de libertad de información del Financial Times sobre el tema.
La cifra de £22bn incluyó £9,4bn de la decisión de Reeves de aceptar recomendaciones independientes para aumentos de salarios en el sector público y £6,4bn de costos no financiados del sistema de asilo de Gran Bretaña.
En una respuesta a Hunt publicada en el sitio web de la OBR, Hughes defendió el manejo del organismo de la revisión, diciendo que solo concernía “la calidad y extensión de la información” suministrada por el Tesoro.
“Los resultados y recomendaciones solo conciernen a la relación institucional entre la OBR y el Tesoro”, escribió. “No revela consejos proporcionados a los ministros ni comenta o se refiere a la conducta o decisiones de los ministros”.
Hunt dijo que habría esperado haber participado plenamente en la revisión y que la OBR debería haber solicitado opiniones “sobre su contenido de las personas con quienes recaía la responsabilidad política en ese momento”.