El espacio aéreo israelí fue reabierto el domingo por la mañana después del ataque sin precedentes de Irán al país, informaron los medios locales tras un cierre de siete horas del espacio aéreo.
Se informó que el Aeropuerto Ramon en el sur del país permanecerá cerrado por el momento.
El ejército israelí dijo que ha interceptado el 99% de los proyectiles disparados desde Irán.
Teherán había lanzado “más de 300 amenazas de diversos tipos”, dijo el portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari, el domingo. “La amenaza iraní se encontró con la superioridad aérea y tecnológica de las FDI, junto con una fuerte coalición de combate, que juntos interceptaron la abrumadora mayoría de las amenazas.”
Hagari habló de “un logro estratégico muy significativo.” De los 170 misiles no tripulados lanzados por Irán, “ninguno cruzó el territorio israelí.”
Varios fueron derribados por aviones de combate israelíes, defensas aéreas israelíes y “los sistemas de defensa aérea y aviones de nuestros socios”, dijo. De los más de 30 misiles de crucero disparados por Irán, ninguno había llegado a Israel.
“De más de 120 misiles balísticos, solo unos pocos cruzaron al territorio israelí, mientras que el resto fue interceptado”, continuó Hagari. “Estos cayeron en la Base Aérea de Nevatim, causando solo daños menores en la infraestructura.” La base seguía funcionando con normalidad, agregó, reflexionando que Irán pensaba que podría paralizar la base.
También se lanzaron ataques desde Iraq y Yemen, pero no alcanzaron a Israel, dijo el portavoz. Se habían disparado docenas de cohetes desde Líbano hacia el norte de Israel, pero nadie resultó herido en los ataques, añadió.
“Durante los últimos seis meses, hemos estado operando en estrecha coordinación con nuestros socios, liderados por el CENTCOM de Estados Unidos, el Reino Unido, Francia y otros países que operaron la noche pasada,” señaló Hagari.
Por primera vez en la historia de la República Islámica, Irán atacó directamente a su archienemigo Israel. Los Guardianes de la Revolución Islámica (IRGC) dijeron que habían disparado docenas de drones y misiles.
La operación fue un ataque de represalia por el asesinato de altos oficiales iraníes en Siria. El 1 de abril, dos generales de brigada fueron asesinados en un presunto ataque aéreo israelí en el complejo de la embajada de Irán en la capital siria, Damasco.