Los palestinos en Cisjordania, ocupada por Israel, están recibiendo el Ramadán con poco de la alegría habitual. En medio de los continuos ataques de Israel en Gaza y la creciente violencia en Cisjordania, las decoraciones festivas y el ambiente celebratorio del mes sagrado están siendo reemplazados por sentimientos de impotencia y desesperanza.
“No hay alegría,” dijo Hana Karameh, una madre de cinco hijos de la ciudad de Hebrón.
Este año, el Ramadán será “incompleto,” dijo. Normalmente, en la noche anterior al primer ayuno, solían rezar juntos con sus vecinos y reunirse para el suhoor —la comida antes del amanecer— mientras los niños disparaban fuegos artificiales.
El domingo por la noche, al comenzar el mes sagrado, dijo, “no hubo nada de eso.”
Incluso antes de Ramadán, la Sra. Karameh dijo que le costaba sentarse a comer sabiendo que muchas personas en Gaza estaban muriendo de hambre. “Me pregunto, ¿comieron? ¿bebieron?” dijo.
Desplazados palestinos preparando la comida iftar afuera de una carpa en Rafah, Gaza, el lunes.Créditos…Mohammed Abed/Agencia France-Presse — Getty Images
La Sra. Karameh dijo que su esposo solía llevar a sus hijos más pequeños al mercado para comprar dulces y abastecerse de alimentos la noche antes de que comenzara el Ramadán. Luego los llevaba a la mezquita para rezar el Taraweeh, una oración nocturna diaria del Ramadán. Pero este año, dijo, la familia no pudo hacer esas cosas.
“Normalmente éramos siete personas en nuestra mesa del iftar,” dijo, refiriéndose a la comida que rompe el ayuno por la noche. “Pero este año seremos cinco.”
El esposo de la Sra. Karameh, Jamal, de 55 años, y su hija Baraah, de 19, fueron detenidos hace más de tres meses por las fuerzas israelíes y están en detención administrativa, sin cargos ni juicio. Se encuentran entre los más de 7,500 palestinos en Cisjordania y Jerusalén Este que han sido detenidos por las fuerzas israelíes desde los ataques liderados por Hamás el 7 de octubre, según la Autoridad Palestina, que ejerce un control limitado sobre Cisjordania.
Los palestinos en Cisjordania también son menos propensos a organizar lujosas comidas de iftar este año debido a que su situación económica ha empeorado en los últimos cinco meses. Las restricciones y cierres israelíes en toda Cisjordania han dejado a los negocios luchando desde el 7 de octubre.
“Es un sentimiento muy diferente en comparación con años anteriores,” dijo Bassam Abu al-Rub, un periodista de la ciudad de Jenin en Cisjordania, que vive en Nablus. “Fui al supermercado y solo compré ingredientes básicos porque cuando nos sentamos a la mesa para comer después de ver las escenas en Gaza, nos sentimos descorazonados.”
Un vendedor vendiendo qatayef, un postre tradicional del Ramadán, cerca de Tulkarem en Cisjordania el lunes.Créditos…Alaa Badarneh/EPA, vía Shutterstock
La creciente violencia y las incursiones regulares de Israel en Cisjordania han matado a más de 425 personas allí desde el 7 de octubre, según el Ministerio de Salud Palestino en Ramallah —y el saldo sigue aumentando. El ministerio dijo el miércoles que las fuerzas israelíes habían matado a dos personas durante la noche cerca de la ciudad de Al Jib. El ejército israelí ha dicho que las incursiones son parte de sus esfuerzos antiterroristas contra miembros de Hamás en Cisjordania.
“Además de la guerra en Gaza, Cisjordania ha estado viviendo una guerra desde 2021,” dijo el Sr. Abu al-Rub, refiriéndose al año en que las incursiones israelíes, detenciones y violencia de colonos comenzaron a aumentar bruscamente en el territorio ocupado. “Imagina cuando estás viviendo este estado emocional de incursiones diarias, sonidos de disparos y bombas de gas y detenciones regulares,” dijo el Sr. Abu al-Rub en una llamada telefónica. “Por supuesto que temerás una escalada” durante el mes sagrado, añadió.
El Sr. Abu al-Rub dijo que cada año esperaba que Israel le otorgara un permiso para visitar Jerusalén y rezar en la Mezquita de Al Aqsa, uno de los sitios más sagrados del Islam. Pero este año, no tenía muchas esperanzas de poder ir.
Al Aqsa, que se encuentra en un lugar venerado por los judíos como la ubicación de dos templos antiguos, ha sido durante mucho tiempo un punto de controversia, y en los últimos años Israel ha ejercido un control más estricto sobre ella. El lunes, la agencia de Israel que supervisa la política en los territorios palestinos publicó en Facebook que solo se permitiría la entrada a Israel desde Cisjordania a hombres mayores de 55 años, mujeres mayores de 50 años y niños menores de 10 años para rezar en Al Aqsa durante el Ramadán.
Gabby Sobelman contribuyó con reportes.
— Hiba Yazbek reportando desde Jerusalén