Estados Unidos y Gran Bretaña llevaron a cabo grandes ataques militares el lunes contra ocho sitios en Yemen controlados por militantes hutíes, según afirmaron ambos países. Los ataques señalaron que la administración Biden tiene la intención de librar una campaña sostenida y, al menos por ahora, indefinida contra el grupo respaldado por Irán que ha interrumpido el tráfico en vías marítimas internacionales vitales.
Los ataques, el octavo en casi dos semanas, alcanzaron múltiples objetivos en cada sitio y fueron más grandes y amplios que una reciente serie de ataques más limitados contra misiles hutíes individuales que, según los estadounidenses, aparecieron repentinamente. Esos misiles fueron alcanzados antes de que pudieran ser disparados a barcos en el Mar Rojo o el Golfo de Adén.
El lunes por la noche, los ataques planeados, que alcanzaron radares, así como sitios de drones, misiles y almacenes subterráneos de armas, fueron más pequeños que los primeros salvas punitivas el 11 de enero. Esos alcanzaron más de 60 objetivos en casi 30 sitios en Yemen en una expansión del conflicto en el Medio Oriente que la administración Biden había tratado de evitar.
The New York Times