MADRID (AP) — Un juez español ha abierto una investigación por presunto fraude y falsificación de documentos contra el socio de la poderosa presidenta regional de derecha de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quien recientemente ha enfrentado una ola de llamados a renunciar por diversas controversias.
El movimiento del viernes seguramente aumentará la presión sobre su partido, el Partido Popular, la principal formación de la oposición conservadora en España, para que tome medidas en su contra.
Ayuso, vista como una posible líder futura del partido y candidata a primera ministra, ha sido objeto de críticas en los últimos meses en varios frentes. La semana pasada, informes de prensa señalaron que la oficina de impuestos de España está investigando acusaciones de fraude fiscal contra su pareja, Alberto González Amador.
El presunto enriquecimiento de éste gracias a sus conexiones con Ayuso ha llevado a los partidos de la oposición a exigir su renuncia inmediata.
Ayuso, quien está de visita en Chile el viernes, ha respondido, negando las acusaciones y diciendo que son parte de una campaña de oposición orquestada para intentar frenar su ascenso político y desviar la atención de un escándalo importante que afecta al partido gobernante, el Partido Socialista.
Ayuso también afirma que aunque vive en el lujoso apartament de Madrid de su pareja, sus asuntos financieros no tienen nada que ver con ella.
La acción judicial del viernes contra González Amador y otros cuatro socios fue provocada por una investigación de la fiscalía sobre fraude fiscal de unos 350,000 euros ($380,000) tras inspecciones de Hacienda.
Abogados de González admitieron el fraude esta semana en un comunicado a la Fiscalía, según informaron medios españoles.
Varios cientos de personas se congregaron el miércoles fuera de la sede del Partido Popular en Madrid para exigir la destitución de Ayuso, la primera manifestación en su contra. Hasta ahora, el partido la ha defendido.
Los Socialistas y el Partido Popular se acusan constantemente mutuamente de corrupción y de no actuar contra los culpables.
Los Socialistas actualmente lidian con las consecuencias de una investigación sobre el dinero obtenido de la compra de mascarillas durante la crisis del COVID-19 que afecta a un asesor de un exministro en el gabinete del Primer Ministro Pedro Sánchez y hombre fuerte del partido Socialista.
Ayuso, de 45 años, ha sido presidenta regional desde 2019 y ganó una abrumadora mayoría en las elecciones regionales del año pasado.
Apodada por algunos como la futura Margaret Thatcher de España, rara vez ha estado lejos de la controversia, tanto dentro de su partido como fuera de él.
Ha sido objeto de críticas intensas por las muertes de más de 7,000 personas en residencias de ancianos durante la pandemia de coronavirus de 2020, ya que se dieron órdenes de que no fueran trasladadas para recibir tratamiento en hospitales sobrecargados de la región.
Durante la crisis, también llamó mucho la atención en el país y en el extranjero desafiando las políticas de confinamiento del gobierno nacional.
Esta semana, defendió a su asesor principal contra acusaciones de que había acosado a periodistas considerados de medios de comunicación de oposición que han estado cubriendo la historia sobre su pareja.