Durante las primeras seis semanas de la guerra en Gaza, Israel utilizó rutinariamente una de sus bombas más grandes y destructivas en áreas designadas como seguras para civiles, según un análisis de evidencia visual realizado por The New York Times.
La investigación en video se centra en el uso de bombas de 2,000 libras en una zona del sur de Gaza donde Israel había ordenado a los civiles que se trasladaran para ponerse a salvo. Mientras que bombas de ese tamaño son utilizadas por varias fuerzas militares occidentales, los expertos en municiones afirman que ya casi nunca son lanzadas por las fuerzas estadounidenses en áreas densamente pobladas.
The Times programó una herramienta de inteligencia artificial para escanear imágenes de satélite del sur de Gaza en busca de cráteres de bombas. Los reporteros de The Times revisaron manualmente los resultados de la búsqueda, buscando cráteres de aproximadamente 40 pies de diámetro o más. Los expertos en municiones afirman que normalmente solo las bombas de 2,000 libras forman cráteres de ese tamaño en el suelo arenoso y ligero de Gaza.
Finalmente, la investigación identificó 208 cráteres en imágenes de satélite y videos de drones. Debido a la limitada cantidad de imágenes de satélite y a las variaciones en los efectos de las bombas, es probable que haya muchos casos que no fueron capturados. Pero los resultados revelan que las bombas de 2,000 libras representaron una amenaza generalizada para los civiles que buscaban refugiarse en el sur de Gaza.
En respuesta a preguntas sobre el uso de bombas en el sur de Gaza, un portavoz militar israelí dijo en un comunicado a The Times que la prioridad de Israel era destruir a Hamas y que “este tipo de preguntas se investigarán en una etapa posterior”. El portavoz también afirmó que las Fuerzas de Defensa de Israel “toman precauciones factibles para mitigar el daño a los civiles”.
Pero funcionarios estadounidenses han dicho que Israel debería hacer más para reducir las víctimas civiles mientras combate a Hamas. El Pentágono aumentó los envíos a Israel de bombas más pequeñas que considera más adecuadas para entornos urbanos como Gaza. Aún así, desde octubre, Estados Unidos también ha enviado más de 5,000 municiones MK-84, un tipo de bomba de 2,000 libras.
Eric Schmitt, John Ismay, Neil Collier, Yousur Al-Hlou y Christoph Koettl contribuyeron con reportajes.