Estados Unidos se opone a una ofensiva terrestre israelí en Rafah a menos que Israel garantice la seguridad de más de un millón de personas actualmente apretujadas en la ciudad, dijo un portavoz del Departamento de Estado el lunes, sumándose a las repudios de la administración Biden a la acción militar esperada.
Al mismo tiempo, funcionarios de las Naciones Unidas y la Corte Penal Internacional adoptaron un enfoque más absoluto contra la esperada invasión israelí de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, advirtiendo de consecuencias catastróficas.
Hasta el momento, sin embargo, la creciente presión internacional sobre Israel para restringir su campaña militar parece haber tenido poco efecto; el gobierno israelí ha dicho repetidamente que enviará fuerzas terrestres a Rafah para derrotar a Hamas. El primer ministro Benjamin Netanyahu ha pedido al ejército que elabore un plan para evacuar a civiles de la ciudad superpoblada para minimizar las bajas, pero grupos internacionales de ayuda han dicho que la evacuación de tanta gente es irrealista.
“No apoyamos ninguna campaña militar en Rafah en el futuro mientras no puedan dar cuenta adecuadamente de las 1.1 millones de personas, según algunas estimaciones, que se encuentran en Rafah hoy, algunas de las cuales ya han sido desplazadas, algunas de las cuales han sido desplazadas varias veces”, dijo Matthew Miller, portavoz del Departamento de Estado, a los periodistas el lunes. “Creemos que se necesita un plan creíble que puedan ejecutar antes de emprender cualquier campaña militar en Rafah.”
La Casa Blanca ha transmitido un mensaje similar varias veces en los últimos días. El domingo, el presidente Biden reafirmó la visión al Sr. Netanyahu durante una llamada telefónica.
Stéphane Dujarric, el portavoz del secretario general de la ONU, António Guterres, dijo el lunes que cualquier incursión en Rafah pondría en peligro la entrega de ayuda esencial a un territorio donde hay escasez crítica de alimentos, agua, medicinas y refugio, y donde la mayoría de las personas han huido de sus hogares. Rafah contiene el único cruce fronterizo entre Gaza y Egipto, y ese cruce es el portal principal para la ayuda.
Las Naciones Unidas, indicó, no participarían en los planes de evacuación de Israel.