Agencias de noticias estatales rusas informaron que el dispositivo explosivo, que mató al Kirillov de 54 años y a su asistente en la Avenida Ryazansky, tenía una fuerza explosiva equivalente a 300g de TNT. Agregaron que expertos en bombas y perros de búsqueda especializados habían inspeccionado la zona circundante y no se encontraron otros explosivos. Bajo sanciones del Reino Unido, Kirillov estaba sujeto a un congelamiento de activos y una prohibición de viaje. En mayo, Estados Unidos acusó a Rusia de desplegar armas químicas como un “método de guerra” en Ucrania, en violación de las leyes internacionales que prohíben su uso. Funcionarios del Departamento de Estado dijeron que Rusia utilizó el agente asfixiante cloropicrina para obtener “ganancias en el campo de batalla” sobre Ucrania. El Coronel Ucraniano Artem Vlasiuk había dicho anteriormente que más de 2,000 miembros del servicio ucraniano habían sido tratados en hospitales por envenenamiento químico durante el curso de la guerra y tres personas habían muerto. El Kremlin rechazó las acusaciones en ese momento, llamándolas “infundadas”. Kirillov sirvió en diferentes roles en el ejército de Rusia asociados con materiales peligrosos, incluida la Dirección del Jefe de las Tropas de Defensa Radiológica, Química y Biológica. Según el SBU, las fuerzas rusas arrojan armas químicas sobre los soldados ucranianos con drones. Fue nombrado jefe del NBC en 2017.