BUDAPEST, Hungría (AP) — Hungría intentará resolver un disputa con Ucrania sobre la transferencia de petróleo ruso para septiembre para evitar una posible crisis energética, un ayudante del primer ministro húngaro Viktor Orbán dijo el viernes,
El jefe de gabinete de Orbán, Gergely Gulyás, alegó que Kyiv estaba “chantajeando” a Budapest al bloquear la transferencia de cierto crudo ruso a través de su territorio.
Ucrania adoptó el mes pasado sanciones contra Lukoil, la empresa rusa no estatal más grande. Hungría recibe la mayor parte de su crudo de Rusia a través del oleoducto Druzhba o “Amistad” que atraviesa Europa central a través de Bielorrusia y Ucrania, aproximadamente la mitad de la cual procede de Lukoil.
La decisión enfureció a funcionarios en Eslovaquia y Hungría, que argumentaron que el suministro bloqueado pondría en peligro su seguridad energética. Los dos países amenazaron con emprender acciones legales contra Kyiv a menos que se permitiera a Lukoil reanudar sus entregas de crudo.
El viernes, el jefe de gabinete de Orbán, Gergely Gulyás, dijo en una conferencia de prensa que Ucrania estaba “inexplicablemente chantajeando a Hungría y Eslovaquia cortando el suministro de petróleo.” Sugirió que el bloqueo del crudo de Lukoil fue en respuesta a la “postura pro-paz” de los dos países de Europa central.
Orbán, considerado el socio más cercano del presidente ruso Vladimir Putin en la Unión Europea, ha roto con otros líderes de la UE al negarse a proporcionar armas a Ucrania para defenderse de la invasión a gran escala de Rusia. Ha retrasado, diluido o bloqueado rutinariamente los esfuerzos para enviar ayuda financiera a Kyiv e imponer sanciones a Moscú por su guerra.
Esta semana, Hungría dijo que pediría intervención de la UE sobre los suministros bloqueados, y el ministro de Relaciones Exteriores Péter Szijjártó amenazó con que Hungría bloquearía los reembolsos a los países de la UE por su ayuda militar a Ucrania hasta que se resolviera el conflicto.
Gulyás dijo el viernes que el bloqueo de las entregas de Lukoil podría resultar en escasez de combustible, pero que no había “ninguna razón para entrar en pánico” ya que Hungría todavía tiene reservas.
Sin embargo, dijo, “se debe encontrar una solución para septiembre.”
“Hungría no quiere chantajear a Ucrania. Esperamos que la UE ayude, pero si no, necesitaremos buscar otras soluciones,” dijo Gulyás.
La UE en 2022 aprobó sanciones a la importación de petróleo ruso al bloque en respuesta a la invasión de Putin en Ucrania, aunque se concedió una excepción a Hungría, Eslovaquia y la República Checa sin salida al mar para permitirles tiempo para encontrar otras fuentes de crudo.