Cerca de 45,000 trabajadores portuarios en todos los principales puertos de la costa este y del golfo se están preparando para una huelga que comenzará a principios de la próxima semana, amenazando con cerrar las puertas de comercio que manejan aproximadamente la mitad de todas las mercancías enviadas en contenedores dentro y fuera de los EE. UU.
Las negociaciones entre el sindicato que representa a los trabajadores portuarios y un grupo de la industria naviera que representa a los operadores de terminales y transportistas marítimos han estado estancadas durante meses, con ambas partes emitiendo declaraciones conflictivas esta semana sobre su voluntad de negociar.
Los expertos dicen que un cierre podría dificultar en gran medida el flujo de mercancías y aumentar los costos de envío. Cualquier aumento en dichos gastos podría repercutir en los consumidores justo cuando la inflación en EE. UU. se normaliza, e incluso potencialmente obstaculizar a la Reserva Federal cuando finalmente se incline a reducir las tasas de interés.